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«Un imputado no puede permanecer en el Gobierno»

El primer teniente de alcalde ha dicho esta frase de forma reiterativa en los últimos plenos: ¿cumplirá su palabra si la jueza lo cita?

Las peripecias dialécticas del primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Sevilla, Antonio Rodrigo Torrijos, lo abocan ahora a la cuerda floja. Por diferentes razones, en los plenos municipales de los últimos tiempos ha repetido esta frase: «Un imputado no puede permanecer en el Gobierno». Ahora, con la Fiscalía Anticorrupción pisándole los talones por su posible participación en la venta «ilegal» de los terrenos de Mercasevilla a la empresa Sando, que ofertaba 50 millones de euros menos que la mejor postora, Noga, las declaraciones del propio Torrijos son la espada de Damocles. Si la jueza Mercedes Alaya lo termina imputando por ser uno de los miembros de la ejecutiva de Mercasevilla que firmó el pliego de condiciones en el que se beneficiaba a Sando, Rodrigo Torrijos será preso de sus palabras.

«Un imputado no puede permanecer en el Gobierno». La primera vez que el portavoz comunista pronunció este lema no contó con que uno de sus socios de Gobierno, el delegado de Movilidad, Francisco Fernández, acababa de ser imputado por un presunto caso de enchufismo: el de la contratación como director del Instituto del Taxi de un ex cuñado del alcalde. Poco después se archivó la causa, pero el PP no desperdició la oportunidad de reprocharle a Torrijos que estaba gobernando con un imputado. Porque el primer teniente de alcalde se empeñaba en traer a colación historias de políticos de «la derecha carpetovetónica» de fuera de Sevilla que habían sido llamados a declarar ante los jueces por supuestos casos de corrupción. La primera vez que dijo la frase fue en el Pleno del 17 de octubre de 2008 con motivo de una moción de la que sigue presumiento Torrijos incluso en su blog. Aquel día, IU propuso «exigir a la dirección nacional del PP y a sus direcciones regionales, provinciales y locales la dimisión inmediata de todos los cargos públicos» implicados en procedimientos judiciales. El portavoz comunista apuntó al alcalde de La Carolina, al concejal de Medio Ambiente de Marbella, al alcalde de Morón y a concejales del PP en La Línea, Palos, Alhaurín, Barbate, Punta Umbría y Madrid, entre otros. Y el PP le refrescó la memoria con la situación del delegado de Movilidad. Pero tras la liberación de Fernández de aquella causa, Torrijos ha reiterado la frase —«un imputado no puede permanecer en el Gobierno»— aludiendo al caso Gürtel en puntos de los plenos que nada tenían que ver con ese asunto.

Ahora el cerco se estrecha a su alrededor. La Fiscalía Anticorrupción estudia pedir su imputación y la Policía Judicial ya le ha tomado declaración. ¿Será Rodrigo Torrijos coherente consigo mismo si la jueza lo cita? En ese momento se verá qué valor tiene su palabra, publicada en las actas de los plenos del Ayuntamiento, cuyo salón ha sido calificado por él mismo como «un lugar sagrado para mí».

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