El G-10 denuncia que va a haber «represalias» de los empresarios

La publicación de los carteles de la Feria de Fallas , en los que no están incluidos cinco de los diez toreros que forman parte del llamado G-10 —que sí cobrarán los derechos televisivos—, ha desencadenado la polémica. Así, el grupo ha emitido un comunicado en el que señala que «se han buscado entre nosotros cabezas de turco y van a producirse toda clase de represalias, como ya se desprende de cuanto ha sucedido en la feria de Valencia . Pero estamos unidos y creemos tener razón»,

El comunicado, firmado por los diez componentes del G-10 — Enrique Ponce , Morante de la Puebla, César Jiménez, El Juli , El Fandi, José María Manzanares , El Cid, Miguel Ángel Perera, Cayetano y Alejandro Talavante— acusa al sector empresarial en general de «insólitas alianzas empresariales y pactos corporativos para malograr nuestra iniciativa», precisando que «el problema no es económico ni cuantitativo. Es cualitativo. Pensamos que el reparto de los ingresos de televisión no reconoce equilibradamente el protagonismo ni la exposición de los toreros. Nos asiste una motivación ética, por mucho que trate de usarse la demagogia y la intimidación para simplificar un debate de mucho mayor calado».

Como ya desveló ABC el sábado, la empresa All Sport Media , que gestiona los derechos de imagen de este grupo, ha recibido de Simón Casas, empresario de Valencia, 279.000 euros por este concepto, que se repartirá entre los diez toreros, a pesar que sólo están contratados para el ciclo la mitad. En este sentido, el comunicado señala que «nos parece sensato que los toreros se repartan el 50% de los ingresos de la televisión. No hablamos del G-10, sino del porcentaje que debería corresponder a los diestros en cada festejo. Nuestra sería la parte proporcional en función de las actuaciones. Esa, y no otra, ha sido la línea con que ASM ha planteado las negociaciones».

Precisan, asimismo, que «se está tergiversando nuestro mensaje y ha empezado a airearse parcial y arbitrariamente una serie de cifras, de comentarios y de informaciones que pretende reducir el debate al dinero y convertirnos en mercaderes».

Igualmente, anuncia el G-10, «la creación de una Fundación para reivindicar la Fiesta y defenderla en su dimensión cultural, sociológica y educativa. De hecho, vamos a financiarla precisamente con el dinero recaudado que nos depare los eventuales derechos audiovisuales».

Pero no han sido los toreros los únicos en hablar sobre este tema. También Javier Folqué , representante del G-10 y cabeza visible de ASM, ha emitido un comunicado en el que ataca a Simón Casas , calificando de «sorpresa» las declaraciones del empresario que, a su juicio, «ha pretendido manipular desde su interés el contenido de las negociaciones». También precisa Folqué que «cuesta trabajo desvincularlo de una política de posibles represalias, porque es difícil entender para un aficionado que uno de los triunfadores de la pasada Feria no esté presente», a la par que «nunca hemos impuesto a diez toreros. Hemos planteado un paquete audiovisual de un máximo de diez puestos, de forma que quedaba a su arbitrio escogerlos, combinarlos o excluirlos».