Y el cocinero de Marta
Marcelo Tejedor es una persona con «misterio galaico». Hace una década revolucionó la cocina gallega y, por ende, la española, en su restaurante Casa Marcelo, en Santiago de Compostela. Hoy se le persigue porque será el encargado de servir el banquete en la boda de la hija de Amancio Ortega, el magnate de la moda. De lo que servirá en día tan señalado nada se sabe. Y hay que respetarlo, no sólo por esa discreción que siempre ha mantenido la familia, sino por el propio carácter de este cocinero, un espíritu libre educado culinariamente en Francia, con Jacques Maximin como referente y mesías.
En 2004 le concedieron su primera Estrella Michelin, un galardón que supuso una ruptura con lo establecido, porque «nunca se había otorgado este premio a un restaurante donde no había carta». Después la perdió, y este año ha subido de nuevo al olimpo recuperándola y consiguiendo que su icono gastronómico, la merluza de Celeiro, se conozca en el mundo y que un plato tan sencillo como sus sardinas en scabeche se haya convertido en uno de los diez Mejores del Año. No hacen falta más palabras para saber cuál será el menú de la boda del año.
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