Producir y almacenar gas natural en Doñana. Ese es el objetivo de la empresa Petroleum Oil & Gas España, filial del Grupo Gas Natural, que ahora encuentra vía libre tras la aprobación de la correspondiente Declaración de Impacto Ambiental (DIA) por parte del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM). El gobierno central ha resuelto favorablemente el desarrollo del proyecto denominado El Saladillo, en el entorno del Parque Nacional de Doñana, al entender que no producirá efectos adversos significativos en el medio ambiente. En este sentido aseguran que «no se pone en riesgo ningún ecosistema» y que la DIA se ha elaborado con «la máxima exigencia y rigurosidad».
La nueva infraestructura prevé la realización de cinco nuevos sondeos de gas desviados desde los emplazamientos ya existentes con instalaciones de superficie asociadas, así como la instalación de un gaseoducto de interconexión que sustituirá al que hay entre los emplazamientos de Saladillo y Rincón.
Durante el periodo de consultas previas se recibieron alegaciones por parte del Parque Natural de Doñana, la Dirección General de Prevención y Calidad Ambiental, la Dirección General de la Red de Espacios Naturales Protegidos y Servicios Ambientales de la Consejería de Medio Ambiente, y la Delegación Provincial de Huelva.
Éstas han sido tenidas en cuenta para lograr que las afecciones al medio ambiente en una zona de especial protección como Doñana y su entorno «no sean significativas».
El entorno de Doñana, aseguran, «no sufrirá efectos adversos significativos»
A pesar de que el Gobierno ha logrado suficientes garantías para salvaguardar el entorno natural, al actuarse sobre terrenos catalogados como zonas de máxima protección, los ecologistas e IU, socio de gobierno del PSOE en la Junta de Andalucía, expresaron ayer su total oposición al proyecto.
Ecologistas en Acción adelantó que no se quedarán de brazos cruzados y denunciarán frente a las autoridades europeas lo que consideran una «clara agresión» al Parque Natural. Entienden que se «vulnera» la normativa de protección y se convierte a Doñana en un gran almacén de gas. Por su parte, el representante de la organización conservacionista WWF, Juan José Carmona, consideró que más que razones políticas, el propio Estado «tiene interés en asegurarse una reserva estratégica de recursos energéticos».
También ha mostrado su no rotundo al proyecto el coordinador provincial de Izquierda Unida en Huelva, Pedro Jiménez. Desde la coalición se ha recordado el papel que en todo este proceso haya podido tener el ex presidente del Consejo de Participación de Doñana y ex presidente del Gobierno, Felipe González, relacionado con Gas Natural Fenosa, a través de su presencia en el consejo de administración.
La compañía ya disfrutaba de las concesiones de explotación de yacimientos de hidrocarburos en los parajes de Marismas A, B-1 y C-2, concedidas a finales de los años 80 y mediados de los 90, si bien ahora logra, además, la autorización de almacenamiento subterráneo de gas.