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Feria de La Carlota

El Ayuntamiento de La Carlota veta al Cristo de la Misericordia

Las casetas municipales por las fiestas en honor al patrón no podrán tener motivos religiosos

El Ayuntamiento de La Carlota veta al Cristo de la Misericordia

D. JURADO

El Ayuntamiento de La Carlota, en manos del PSOE, ha sacado a concurso público las casetas familiares del recinto ferial para las próximas fiestas patronales: La Feria en honor del Santísimo Cristo de la Misericordia, que se celebrará del 10 al 14 de septiembre. Llama la atención que el pliego de condiciones para la adjudicación de estas instalaciones, en el apartado de «Derechos y obligaciones de las partes», en el punto 23 se haga referencia expresa a la prohibición que se le impone a los adjudicatarios para que no pongan motivos religiosos, como puede ser un cartel con la imagen del patrón o una fotografía del Cristo de la Misericordia.

Literalmente señala que «quedan prohibidos en las casetas el uso de elementos decorativos, adornos o cualquier otro con connotaciones de ideología política y/o religiosa». El hecho no deja de ser paradójico. Se prohíbe por normativa municipal hacer referencia al patrón en cuyo honor se celebra la Fiesta grande del municipio, que es la que pone el broche final a todas las ferias y verbenas que se celebran a lo largo del verano en el municipio y sus distintas aldeas.

Aparte, de este asunto, que no deja de ser contradictorio, existen otra serie de condiciones en el pliego, al que ha tenido acceso ABC, que hacen imposible que asociaciones de ámbito religioso puedan concurrir al concurso.

Solo para empresarios

En el punto 9 sobre la «Capacidad para concurrir al sorteo público de licencias de ocupación temporal del dominio público para la instalación y explotación de casetas familiares de la Feria de la Carlota 2014», se indica que los licitadores deberán ser personas físicas o jurídicas «cuya finalidad o actividad tenga relación directa con el objeto del contrato, según resulte del epígrafe del Impuesto de Actividades Económicas, de sus respectivos estatutos o reglas fundacionales».

Es decir, deberán ser empresarios acreditados. Otra exigencia que limita la concurrencia a estas casetas familiares de hermandades o cofradías -colectivos que tradicionalmente tienen un protagonismo en este tipo de eventos-, es que a los licitadores se les exige disponer de «una organización con elementos personales y materiales suficientes para la debida realización de la actividad de caseta de feria».

Veto a las hermandades

Por si quedaban dudas sobre el perfil que busca el Ayuntamiento para adjudicar las cuatro casetas familiares del recinto ferial, que este año vuelve a acoger las fiestas patronales tras realizarse las últimas ediciones en el núcleo urbano, en el pliego se especifica que «los empresarios-licitadores deberán contar con la habilitación empresarial o profesional», es decir, que deberán acreditar su «experiencia en actividades eventuales destinadas a acoger la celebración de fiestas, verbenas populares y romerías patronales o tradicionales, celebraciones y eventos de interés social, entre otros».

El Ayuntamiento también evita la picaresca de que un empresario concurra al sorteo para luego traspasar la caseta a una hermandad o cofradía. «Las actividades se ejercerán de forma personal por el titular de la licencia, quedando totalmente prohibida la trasmisión de la licencia a terceros sin la debida autorización», recoge el pliego de condiciones.

ABC intentó ayer contactar con la alcaldesa, Rafaela Crespín (PSOE), para que conocer su opinión al respecto. No fue posible puesto que la regidora no atendió a las llamadas de este medio.

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