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Falló su entrada en la Junta

Durán se «cobra» su deuda interna en el PSOE

En menos de un año, deja Capitulares por el Senado y el ascenso orgánico en el aparato

Durán se «cobra» su deuda interna en el PSOE V. MERINO

M. P. A.

Hace poco menos de un añose veía en la mesa del Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía formando parte del equipo de Susana Díaz. Juan Pablo Durán (Córdoba, 1964), secretario general de los socialistas cordobeses, se las prometía felices entonces.

Hombre disciplinado con la línea oficialista que impere y de notable ambición, hacía cábalas. Dejar la pesada losa de la portavocía en el Ayuntamiento de Córdoba tras un mal resultado en sus primeras elecciones municipales como cabeza de cartel para pasar a la primera línea del escaparate y la gestión. Sin embargo, la norma interna no escrita de que un líder de aparato provincial no debía asumir cartera en el Gobierno andaluz fue rápidamente reclamada por otros compañeros. Y su plan se chafó. El único consuelo que le quedaba era situar en su propio lugar a alguna persona de confianza, como fue el caso de la por entonces alcaldesa de Baena, María Jesús Serrano, hoy titular de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio.Desde ese momento, el aparato «susanista» tenía una deuda con un dirigente orgánico muy conocedor de las tripas del partido en Córdoba y Sevilla. Una cuenta que no tardaría en cobrarse en un primer pago. Tras el congreso regional que fortalecía el dominio absoluto de la dirigente sevillana como mandamás del PSOE andaluz, y en la primera reunión de su ejecutiva en noviembre, Susana Díaz proponía a Durán para ocupar el puesto orgánico que ella misma ostentaba: responsable del Consejo de Política Territorial. La calma parecía volver a las aguas internas en el PSOE cordobés, con escasa visibilidad en la Diputación y no mucho más en Capitulares. Tras la Navidad, comienza a pergeñarse el pago del segundo plazo a Durán, que en los primeros días de marzo hace pública su intención de abandonar la portavocía en el Ayuntamiento y la propia institución para dar el salto como senador del Reino de Españapor designación del Parlamento andaluz y en sustitución de Álvarez de la Chica.Nuevo movimiento de ficha de Susana Díaz, que va encontrando en el dirigente cordobés a un leal correligionario para sus propias aspiraciones y partidas internas a escala federal. No cabe duda que Durán sabe ya a qué árbol se arrima.El tercer y último plazo de cobro se cerró ayer, con la inclusión como vocal en la nueva ejecutiva federal socialista de Pedro Sánchez, y donde la propia Susana Díaz ha situado estratégicamente y sin reparo a sus peones.

Una carrera orgánica la de Durán, que mantiene su poder en Córdoba, su nicho senatorial y su papel de correa interna entre Madrid y Sevilla a las órdenes de la «jefa», pero que ahora deberá refrendar recuperando los malos datos electorales que le pesan desde hace años en Córdoba.

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