Fede Cartabia y un gol para la historia

Gol. Por fin podía celebrarlo El Arcángel en Primera. Muchos seguidores -la mayoría- ni siquiera habían nacido cuando Fermín anotó el último de la historia del Córdoba en la élite. El penalti convertido por el centrocampista madrileño contra el Barcelona se convertiría en un mito del imaginario blanquiverde con el paso de las décadas. Una de esas hazañas con las que instruyeron en el cordobesismo a sus nietos los abuelos de no pocas generaciones: «Estábamos descendidos, pero le quitamos la Liga al Barcelona».

Aquel fue un descenso a lo grande. Quizás por ello se antojase difícil en su momento imaginar una eternidad lejos de la élite como la que a la postre le tocó vivir al Córdoba. El viejo estadio de El Arcángel jamás volvería a ver a su equipo celebrar un gol en la máxima categoría. Y la afición, trasladada al nuevo coliseo, tendría que aguardar, con una extraña mezcla de estoicismo y desesperación, la friolera de 15.454 días para estallar de júbilo entre los mejores.

Fede Cartabia ya es historia. Él probablemente no era consciente cuando embocó con su zurda la pelota en la portería del Celta, pero su gol fulminaba muchos fantasmas en forma de estadísticas. El próximo: lograr la primera victoria de la nueva era.