Ana Belén llega al Gran Teatro con una obra de Vargas Llosa

La obra de Mario Vargas Llosa «Kathie y el hipopótamo» llega hoy, con el cartel de agotadas localidades, al Gran Teatro de Córdoba (20:30 horas) en un montaje protagonizado por Ana Belén y dirigido por Magüi Mira. El texto reflexiona sobre la fantasía y la imaginación con la que se crean historias que no han ocurrido en realidad, sobre el origen de los relatos y su conexión con la vida real. Junto a Ana Belén, completan el reparto Ernesto Arias, Jorge Basanta, Eva Rufo y, tocando el piano en directo, David San José, autor de la música.

La trama cuenta la historia de Kathie (Ana Belén), una mujer de la alta sociedad de Lima, que contrata a un profesor universitario, Santiago Zavala (Ernesto Arias), para que escriba un libro sobre el viaje que ella ha realizado por Asia y África. La adinerada dama pretende escapar de su soledad y de un marido que la engaña mientras relata sus vivencias a ese escritor frustrado y mediocre. La obra parte de una anécdota real que le ocurrió a Vargas Llosa en París, en los años 70. Allí conoció a una señora de la alta burguesía peruana que quería escribir un libro de viajes y lo contrató con este fin.

«Cuando escribí la pieza —escribe el Nobel hispanoamericano a propósito de la obra—, ni siquiera sabía que su tema profundo eran las relaciones entre la vida y la ficción. Mi intención era escribir una farsa, llevada hasta las puertas de la irrealidad (pero no más allá, porque la total irrealidad es aburrida) a partir de una situación que me rondaba. En las sesiones de trabajo de la pareja, a partir de las transformaciones que sufre la historia entre lo que la dama dicta y lo que su amanuense escribe, las vidas de ambos —sus dos vidas, la de verdad y la de mentira, lo que han sido y lo que hubieran querido ser— se corporizan en el escenario, convocadas por la memoria, el deseo, la fantasía, las asociaciones o el azar».

Para Ana Belén, Vargas Llosa como dramaturgo «es un escritor que maneja un lenguaje que es pura riqueza y, para nosotros los actores, encontrarnos con textos como éste, es fantástico». La obra es una mezcla entre realidad y fantasía en la que, explica la actriz, «hay diferentes planos en la función, siempre con un toque de humor irónico y fino, como suele hacer Vargas Llosa». La obra se estrenó en Caracas en 1983.