Carrión y el asunto de no calcar alineación

En el fútbol de antaño, era frecuente escuchar a los aficionados recitar un equipo de memoria . Con el tiempo y los tiempos, esa tradición se ha perdido en beneficio de las rotaciones, los descansos y los sistemas.

Pues bien, el Córdoba de la presente temporada es un claro ejemplo de que es difícil hablar de un once tipo. De hecho, en la era Carrión no se ha repetido alineación desde que el pasado 30 de noviembre se hiciera cargo de la primera plantilla.

En su primera fase, el Córdoba alternaba participación en Liga y Copa . De hecho, su estreno fue ante el Málaga y entonces optó por un equipo muy distinto al que acostumbraba Oltra. Y a eso se le sumaron otros factores como lesiones o regresos de jugadores importantes tras sanción. Por lo tanto, en 2016 echó mano de lo que se podría entender como dos unidades.

Y así siguió en el mes de enero, cuando estaba pendiente la eliminatoria de octavos de final de la Copa y el Alcorcón. Sin embargo, ese partido abrió paso a un periodo de crisis en el que el conjunto blanquiverde no conseguía ganar en casa y empezaba a abrir la herida como visitante al no sumar puntos.

Obviamente, la cercanía con el descenso se unió a los ciclos de sanciones por amarillas o lesiones de jugadores importantes como Juli o Cisma. De ahí que Carrión hasta optara por cambiar el esquema de salida en las alineaciones. Tanto es así, que sólo tras vencer al Elche se especuló con esa posibilidad en Valladolid, pero entonces surgió el inconveniente de Bíttolo, quien estaba a punto de celebrar su segunda paternidad.

El pasado domingo volvió a ganar ante el Almería por la mínima, pero el Córdoba fue mucho más convincente en su juego que en encuentros anteriores. Por lo tanto, no es descartable que por primera vez Carrión vuelva a formar con el mismo equipo de salida en Mallorca. Con todo, habrá que ver si finalmente Héctor Rodas se recupera . En tal caso, pasaría otra semana sin que se repita el «once» en el Córdoba.