¿Cómo hay que vestir para ir al Rocío?

Aunar tradición, elegancia y comodidad. Con esa premisa parten los romeros de sus respectivas ciudades para llegar a la aldea almonteña. Los peregrinos preparan durante todo el año la indumentaria que portarán los días que dure el camino.

En la hermandad cordobesa, el sombrero es lo más característico. Un sombrero cordobés lleno de elegancia, con una copa más alta que desde lejos distingue a la cofradía durante el camino. La serenidad también figura en el marsellés, y en las clásicas botas de cuero, que protegen del polvo y el barro de los parajes naturales.

La mujer también apuesta por la tradición pero, sobre todo, por un traje ligero, fresco y cómodo. Una bata rociera y una camisa permiten a la mujer recorrer el camino con mayor comodidad, alejado a veces del tradicional trajes largos. El poncho también es una de las prendas características, sobre todo para resguardarse de la humedad nocturna, así como la usual toca sobre los hombros.

La estética y la tradición. Sombreros, trajes y batas para hacer el camino hasta la aldea almonteña. Los romeros buscan comodidad en su indumentaria, cada uno a su estilo, pero con gusto y pureza, y sobre todo, portando la medalla de la hermandad, seña de identidad de la histórica romería.