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SALUD

La Junta de Andalucía no ha abierto expedientes en cinco años por vender «garrafón» en Córdoba

La Consejería no tiene registro de la empresa contra la que se ha abierto un procedimiento penal

Un camarero sirve un chupito de una bebida alcohólica ABC

P. GARCÍA-BAQUERO

La Consejería de Salud no tiene registro alguno sobre la empresa distribuidora de bebidas en un polígono de la capital cuyos miembros se enfrentan a cinco años de prisión , acusados de poner en el mercado -después de manipular tanto el etiquetado como el contenido- casi 9.000 botellas de ron de las marcas Legendario y Barceló . Según explicó la Junta de Andalucía a ABC, en cinco años no consta ningún expediente sancionador por vender «garrafón» en el conjunto de la provincia.

El incumplimiento de la legislación sobre seguridad alimentaria y nutrición (Ley 17/2011 de 5 de julio) prevé tres niveles de gravedad con respecto a las infracciones que pudieran cometerse. El incumplimiento por distribuir «garrafón» -fraude de contenido de una bebida alcohólica- se tipifica como grave, con lo que se podría sancionar con multas de entre 5.001 y 20.000 euros . No obstante, el montante final de la sanción dependería de muchas circunstancias y para ello se instruye un expediente. Las autoridades que han actuado en este caso no han comunicado nada a Salud sobre el asunto hasta la fecha, según aseguran desde la delegación territorial.

De hecho, la empresa no consta en los registros de establecimientos alimentarios de Salud, ni se han iniciado aún las actuaciones que correspondan. «La normal coordinación entre Administraciones hará propicia nuestra intervención en caso de que se considerara necesaria», aseguran desde la Junta.

Escasa tramitación

La relación de expedientes sancionadores en el sector de las bebidas alcohólicas en los últimos años revela que su tramitación es escasa. Según datos de la Junta, apenas constan seis procedimientos iniciados por causas diferentes. En 2012 se inició un expediente por trazabilidad , es decir, posibles irregularidades en el procedimiento que permite conocer el histórico, la ubicación y la trayectoria de un producto a lo largo de la cadena de suministros. En 2016 se inició otro contra una empresa que no tenía lavamanos en sus instalaciones. En lo que va de año 2017, la Consejería ha iniciado expedientes sancionadores a cuatro empresas del sector: tres de ellas debido a un etiquetado incorrecto de las sustancias que provocan alergias o intolerancias, y uno por no estar inscrito en los registros de empresas y establecimientos alimentarios de la Junta. Las sanciones de los cuatro expedientes de este año se elevan a 20.004 euros -tres expedientes de 5.001 euros cada uno y uno de 10.002 euros-.

Ninguno de los expedientes iniciados en los últimos años está relacionado con la falsificación de productos mediante bebida a granel y de baja calidad, lo que popularmente se conoce como «garrafón». Sólo consta una petición de aptitud para el consumo por parte de la Agencia Tributaria en 2014, relativa a una partida de bebidas alcohólicas almacenadas en una empresa de Córdoba pero fabricadas por una sociedad clandestina.

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