Hazte premium Hazte premium

TRADICIÓN

Vuelve a Córdoba el helado de toda la vida

Helados Navarro reabre en El Chimeneón reinventando la receta tradicional de 1945

La heladería Helados Navarro, ayer en El Chimeneón VALERIO MERINO

S. L.

Corría el año 1945 cuando abrió en Córdoba la primera heladería local. De manos de un heladero alicantino, que le enseñó el secreto de la crema fría que Marco Polo llevase a Italia de sus expediciones asiáticas, Fernando Navarro experimentó con una receta tradicional que comercializaba desde su local en la calle Ronda de Tejares.

Ayer, el nieto del primer heladero cordobés, que también responde al nombre de Fernando Navarro, abrió en la plaza del Chimeneón un establecimiento heredero de aquel Helados Navarro que hizo las delicias de niños y mayores en la década de los 40 y que se convirtió en un negocio familiar donde aprendieron el oficio su hijo primero y después el hijo de su hijo.

A la técnica que el primer maestro heladero de la familia aprendió del alicantino le incorporó el sabor propio de los helados : cremosos, con sabor intenso, elaborados con frutas y materias de primera calidad. Más de una treintena de sabores se elaboran con una fórmula guardada con recelo a partir de la cual Fernando Navarro planea innovar en nuevos gustos, incorporándolos a los tradicionales: el turrón , la nata , la fresa , la vainilla .

«Los clientes pueden ver todo el proceso», explica Navarro, «sobre una pasteurización de lácteos inicial se van añadiendo los azúcares y se incorporan los sabores hasta que se manteca el helado». El postre perfecto, antes de llegar a casa desde la Cruz de Mayo .

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación