Díaz insiste sobre el impuesto de sucesiones: «Los andaluces no van a pagar la bonificación de los ricos»

STELLA BENOT

16/03/2017
Actualizado a las 15:45h.

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El impuesto de sucesiones parece haberse convertido en el único tema de actualidad política en Andalucía. La sesión de control al Gobierno en el Pleno del Parlamento de este jueves ha pilotado sobre este asunto, si bien no había ninguna pregunta expresa de los portavoces políticos al respecto.

La presidenta Susana Díaz ha acusado al PP de pretender que el 98% de los andaluces « paguen de su bolsillo la bonificación de los ricos» en la comunidad con el impuesto de sucesiones, ya que ha asegurado que si realmente quieren eliminarlo el único competente es el Gobierno central.

El líder del PP andaluz, Juanma Moreno , ha denunciado la «dejación y renuncia» a sus responsabilidades de Díaz por pedir al Gobierno central que se quede con el impuesto y compense a Andalucía . Juanma Moreno ha calificado de «indigno» que la presidenta «renuncie a su capacidad de autogobierno y a un instrumento tan poderoso como la autonomía fiscal porque se trata de un asunto que le resulta incómodo y no quiere que contamine su proyecto personal » en el PSOE.

Díaz ha reclamado la armonización fiscal y ha asegurado que no permitirá «que los ricos pretendan que el conjunto de los andaluces paguen sus impuestos». La presidenta andaluza ha destacado que Mariano Rajoy ya ha interferido en los impuestos de Andalucía, cuando obligó a suprimir el impuesto a los bancos. «Sea riguroso señor Moreno; lo que plantea es que se bonifique para beneficiar a los ricos y no que se elimine». «Demuestre que es al go más que el mandaero de Rajoy en esta tierra».

También el líder de Ciudadanos , Juan Marín, se ha referido a este tributo asegurando que si el Gobierno andaluz hubiese decidido bajarlo se habrían recaudado más fondos para las arcas públicas. «Habríamos dejado de ingresar 180 millones de euros pero su impacto en la economía andaluza hubiese sido mucho mayor, de más de 300 millones de euros por la dinamización de la economía y la generación de empleo y riqueza, lo que nos hubiera permitido mejorar la prestación de los servicios públicos».

Sin embargo, la presidenta andaluza reiteró que no comparte esta visión y que los datos de Ciudadanos «son voluntaristas pero no reales».

El enfrentamiento más tenso ha sido el sostenido entre la presidenta y el líder de Izquierda Unida, Antonio Maíllo , quien ha comparado a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, con el arcángel san Gabriel por el «misterio de la Anunciación» , en referencia a su anuncio de que el día 26 anunciará en Madrid que opta a las primarias del PSOE.

Antonio Maíllo ha hecho referencia al pasado como catequista de Susana Díaz y le ha dicho, «No sabemos si ahora que ha anunciado un anuncio de que va a anunciar que se quiere ir de Andalucía no le ocurrirá que queriendo convertirse en el Arcángel San Gabriel se convierta en un ángel caído».

Unas alusiones que no han sentado nada bien a Susana Díaz quien le ha respondido criticando la alusión a su esfera «privada y personal» y a q ue Maíllo confunda la «libertad de creencias y libertad personal» con su tarea de representación de los andaluces en el Parlamento, a la vez que ha cuestionado si va a tener que ser «condenada" a un centro de reeducación porque sus principios ideológicos no sean lo suficientemente fuertes ».

«Lamento que usted haya decidido ir de falso profeta para anunciar que van a asaltar los cielos. Le deseo que en sus nuevas creencias sea capaz de reconducir a esa formación a la que ha llevado a los peores resultados en años».

Con la portavoz de Podemos, Teresa Rodríguez , Susana Díaz ha debatido de las cláusulas sociales en los contratos de la Junta, una promesa que hizo la presidenta y que se aprobó en el Consejo de Gobierno. La portavoz de la formación morada denuncia duras condiciones laborales de los trabajadores de las contratas de la Junta mientras que Susana Díaz le ha recordado que «diputados de su partido han podido aportar ya en el trabajo de esa comisión; si tiene un problema de comunicación con su grupo lo solucione».

Con todo, Susana Díaz ha acusado a Teresa Rodríguez de intentar sacar «rédito político» al plantear esta pregunta porque «no le agrada reconocer que las cláusulas sociales se aplican», y además el Gobierno andaluz lo hace «con transparencia y llegando al límite de nuestras posibilidades».

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