Hazte premium Hazte premium

De Sevilla a París pasando por Lisboa: Miguel Jiménez retrata «2.198 kilómetros»

El fotógrafo sevillano inaugura este jueves en la Seta Coqueta una exposición de imágenes de sus viajes: polaroids e instantáneas de la belleza escondida de las ciudades

De Sevilla a París pasando por Lisboa: Miguel Jiménez retrata «2.198 kilómetros» Manu Ramos

m. m.

Tras años de tomar fotos por el mundo, de hacer reportajes, de trabajar para bodas y eventos, el sevillano Miguel Jimémez tiene el pudor de no llamarse artista a sí mismo. A pesar de lo bueno y original de su obra. Contaba Billy Wilder que cuando Marilyn Monroe fue a conocer a su futura suegra -la madre del intelectual Arthur Miller - ella entró en el diminuto piso neoyorkino de la señora con toda la dignidad del mundo. Era una estrella de cine. Al final de la comida, fue al servicio y comprobó horrorizada que el excusado, pequeño y pegado a la sala donde estaban su prometido y madre política, tenía además las paredes muy finas, así que decidió abrir los grifos del lavabo y bañera y disimular así lo que iba a hacer allí. A los pocos días, Miller llamó a su madre y le preguntó qué le parecía la Monroe. «Muy buena chica, pero mea como un caballo» , le dijo la buena señora. El pudor, a veces, no es beneficioso.

La exposición que inaugura Jiménez en la Seta Coqueta (calle Regina 9), es un recorrido por España, Portugal y Francia, a través de tres de sus ciudades: Sevilla, Lisboa y París . Hasta el día 31 de octubre y desde este jueves 3 de septiembre se puede contemplar las imágenes calmadas y serenas, retratos de calles y edificios de las tres capitales europeas. «2.198 kilómetros» , que así se llama la exposición porque «es la distancia que hay entre París y Sevilla pasando por Lisboa», es el resultado de la curiosidad de este sevillano viajero , que en realidad nunca supo a lo que quería dedicarse y acabó haciendo fotos.

El eje de la muestra son los viajes que el artista realiza con frecuencia. Escenas costumbristas y detalles de lo bello que hay oculto en cualquier ciudad quedan plasmados en polaroids. «Me encanta la fotografía instantánea (polaroids y similares) y me pareció que era el formato más adecuado para guardar esas postales que me iba encontrando ». Al final, este fotógrafo que se resiste a llamarse artista busca algo bien simple: «Intento mostrar esos lugares que pueden pasar desapercibidos a primera vista, pero que guardan una cierta belleza escondida». O bien complicado.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación