Fernando García vestirá una nueva serie sobre la Sevilla del siglo XVI

Fernando García en los premios Soy Moda 2015. Aldebarán.

El diseñador sevillano se enfrenta a su primera ficción televisiva con Movistar Series y dirigida por Alberto Rodríguez

El diseñador sevillano y ganador del Goya por el vestuario de La Isla Mínima se enfrenta con ilusión a su primera ficción televisiva dirigida también por Alberto Rodríguez y que además tiene Sevilla como protagonista. 15 años haciendo cine español y el máximo galardón del cine español, nos cuenta, le llega cuando empieza a conocer el cine internacional con el próximo estreno de su primer trabajo en inglés, A perfect Day, con Benicio del Toro y Tim Robbins dirigida por Fernando León de Aranoa. Fernando García se define como un «currito» que hace su trabajo lo mejor que puede en una mesa redonda dedicada a la moda, el cine y la televisión en la II edición de las Fashion Business Talks de Soy Moda, celebrada en el Monasterio de San Isidoro del Campo la pasada semana.

¿Cuál es tu visión del vestuario en cine?

La modelo levanta la prenda, pero el actor se lo tiene que creer, verse, analizarse. A mí es la parte que más me gusta del cine, la previa, la preparación. Cuando empecé no había donde estudiar vestuario de cine, yo hice Arte y luego me pasé a la moda. Pero no quería coser, lo que me gustaba era el estilismo, crear looks completos. Conocí a Pepe Reyes (diseñador de vestuario de la serie Isabel) y comencé desde abajo con él hasta llegar a convertirme en jefe de vestuario. Lo mío ya no es trabajo, es forma de vida.

¿Qué ha supuesto el premio Goya para ti?

Estoy encantado con mi Goya, pero parece que ha sido algo mucho mayor, no me lo esperaba. La repercusión, al formar parte de una marca –Antonio García-, ha sido mucho mayor sobre todo en la prensa especializada en moda.

La Isla Mínima
Fotograma de la película La isla Mínima cuyo vestuario le valió el Goya a Fernando García

¿Cómo fue la preparación del vestuario de La Isla Mínima?

La documentación fue preciosa. Sevilla en los años ochenta y en el campo, ahí vestirían como en los setenta. Como suelo hacer mucho vestuario contemporáneo esta película me divirtió. Me encargaron que fuese muy realista, con una gama cromática de marrones y ocres, nada de colores primarios. Eso sumado a la fantástica fotografía y a la luz consiguió esa tensión. La ropa era casi toda alquilada, aunque había trajes construidos como el de Javier Gutiérrez o la cazadora de Raúl Arévalo. Un rodaje es un baile con una coreografía que si algo se descontrola se cae todo. Ya que me pongo a rodar las escenas que más me gustan son las que son a lo grande, con extras, etc.

Al principio de mi trabajo llegué hasta a pedir ropa a mis amigos

¿Cómo te manejas con los limitados presupuestos?

Tienes muchas ideas pero el presupuesto te hace invertir, no es solo saber de colores y moda, también psicología y contabilidad. Yo siempre me paso y pido más equipo (jejeje) Al principio me daba miedo, con lo que hacía con poco dinero también noté que se valoraba más, llegué hasta a pedir ropa a mis amigos.

¿Qué proyectos tiene la firma Antonio García?

Acabamos de hacer el vestuario para el espectáculo de Pasión Vega que comienza ya a girar y una colección de moda al año que presentamos en Madrid. También hicimos el traje de alternativa del torero Lama de Góngora.

¿Y en tu faceta de diseñador de vestuario?

Tengo por estrenar A Perfect Day y Lejos del Mar, dos pelis que prometen. La segunda dirigida por Imanol Uribe y protagonizada por Eduard Fernández y Elena Anaya. Y en un mes comenzamos a rodar El espía de las mil caras en París, Sevilla y Hong Kong, la historia de Francisco Paesa.

Siempre digo que es más difícil hacer vestuario contemporáneo

¿Qué puedes adelantar de esa nueva serie ambientada en la Sevilla del siglo XVI?

En cuanto acabe la peli, empezamos con la serie, las dos con Alberto Rodríguez. Me apetece muchísimo, es mi primera serie y de época. Es para Movistar TV y aún no tenemos título, pero ya hay un equipo de documentación y tienen que digitalizar la ciudad para ver las posibilidades…

¿Qué diferencia el vestuario de época del contemporáneo?

Hacer vestuario de época es como mirar a una chica que va por la calle con un tutú. No es lo mismo que verla con un vaquero. Siempre digo que es más difícil hacer contemporáneo porque todo el mundo opina, en la época no. En la época todo es placentero y vistoso y la gente valora más María Antonieta que otra película más pequeñita.

¿Con qué personaje te quedas de los que has vestido en tu carrera?

Con Laura de Yo también (2009). La interpretaba Lola Dueñas, era un personaje muy duro. Hicimos el perfil de su vestuario juntos y cuando a ella le dieron el premio -Goya y la Concha de Plata- me lo dedicó.

¿Qué dice la ropa de las personas y de los personajes?

Dice mucho, es la identidad. Hay personas que se visten para cubrirse, otras lo hacen para contar algo. La ropa es una forma de expresión, además de ser un arte, dices cómo te sientes y qué te gustaría contar.

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