En el Museo del Traje se reunieron sus amigos, familiares y compañeros de profesión para valorar el legado del malagueño
La madre y los hermanos de David Delfín fueron los encargados de recoger el pasado miércoles a título póstumo el Premio Nacional de Diseño de Moda otorgado por el Gobierno. En el mismo lugar en el que amigos y familiares le daban el último adiós, el madrileño Museo del Traje, todos se volvieron a reunir para homenajear al diseñador malagueño en la entrega del premio.
El ministro de Educación, Cultura y Deporte y portavoz de Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, ha hecho entrega este miércoles del Premio Nacional de Diseño de Moda 2016, concedido a David Delfín, fallecido el pasado 3 de junio. El galardón, que ha recogido María González Corbacho, madre del artista malagueño, y el diseñador Gorka Postigo, es «un cariñoso homenaje a lo que fue y a lo que ha sido el diseñador», ha indicado el ministro.
En una inusual ceremonia, diferente a las habituales entregas de estos galardones, se han dado cita numerosas figuras del mundo de la moda en homenaje a la figura del diseñador rondeño, que llegó al mundo de la moda a finales de los años 90 y que en 2001 creó la firma Daviddelfin junto a los hermanos Postigo (Deborah, Diego y Gorka) y la modelo Bimba Bosé.
En el homenaje se ha querido celebrar el legado del diseñador, que es un compendio de «belleza, de actitud y de vanguardias», ha señalado Méndez de Vigo. Durante su intervención, el ministro ha remarcado que este premio es un galardón que tiene como objetivo «servir como ejemplo de conducta a la sociedad» y ha destacado la figura de David Delfín como «inquieto, insaciable en su pasión artística, multidisciplinar, capaz de enloquecer de admiración hacia sus referentes».
«Su discurso creativo era también intelectual, una punzada de ingenio con la que logró crear escuela, pero también espolear a la sociedad de su tiempo, apelar a su espíritu crítico y comprender tanto la belleza de sus creaciones más hermosas, como su fondo en sinfonía con la trayectoria de su propia marca», ha indicado el ministro de Cultura.
Los jardines del museo se llenaron de rostros conocidos que no quisieron faltar en un día tan importante para el diseñador tanto por los mensajes de cariño que le mandaron como por los vestidos que lucieron los invitados, muchos obra del diseñador. Sin duda, uno de los que no pudo faltar a la cita fue Pablo Sáez, última pareja de David y uno de sus grandes apoyos hasta el final. Otro que no quiso faltar a la cita fue Pelayo Díaz y es que ambos mantenían una relación de lo más especial después de su ruptura sentimental.
Entre los muchos otros amigos que también acudieron a la entrega pudimos ver a Marc Clotet, Bibiana Fernández y Rossy de Palma, Modesto Lomba, Pepón Nieto, Topacio Fresh o Mario Vaquerizo y Alaska que solo tuvieron palabras de agradecimiento a su gran amigo. También estuvieron presentes el secretario de Estado de Cultura, Fernando Benzo, así como familiares, amigos y admiradores del desaparecido creador como los diseñadores Juan Duyos, Helena Ronher, Juan José Oliva o Ángel Schlesser.
En el acto también ha intervenido Alaska, como amiga del diseñador, que ha destacado que David «no solo era un diseñador de moda, sino que bailaba, cantaba, pintaba e inventaba todo el rato historias», rasgos que, según la cantante, es «lo que hace a un artista». Del mismo modo, el diseñador Modesto Lomba, presidente de la Asociación de Creadores de Moda de España -agrupación de la que David Delfín formaba parte como miembro de la Junta Directiva– lo ha recordado en su discurso como una persona «muy comprometida en la defensa de los intereses de los diseñadores de moda».
David Delfín fue galardonado con el Premio Nacional de Diseño de Moda por la «audacia, valentía y compromiso social de su obra, con una señalada identidad española que desarrolla un universo vanguardista propio». El día de su anunció, recibió la noticia estando convaleciente en su casa de Málaga. Entonces, por las secuelas de una operación, no pudo asistir a recoger el premio.
El premio le fue concedido por haber logrado «traspasar las barreras entre la moda y el arte, los géneros y las generaciones, lo comercial y lo artístico». El trabajo del diseñador se ha visto reconocido con numerosos premios a lo largo de su trayectoria profesional, como los de las revistas Men’s Health y Shangay al mejor diseñador del año 2007, el premio internacional The Season’s Book a la mejor colección Otoño/ Invierno 2008-2008 y los premios de las revistas GQ y Shangay al mejor diseñador 2009. En 2003 recibió el Premio L’Orèal París a la mejor colección de un joven diseñador en Cibeles, y repitió en 2012 en la edición en la que celebró su décimo aniversario en la pasarela madrileña con su colección «Nowadays», una revisión de su trayectoria profesional.
