Paseíllo y pasarela de moda para Lama de Góngora

Lama de Góngora en su alternativa en la Maestranza estrenó traje de luces de Antonio García. Reuters.

El novillero sevillano tomó la alternativa con un traje diseñado por la firma Antonio García

El novillero sevillano Paco Lama de Góngora contó en su alternativa el pasado 18 de abril en Plaza de Toros de la Maestranza con José María Manzanares como testigo y con Enrique Ponce como padrino. Para tan importante ocasión en este sábado de Preferia, el joven, sabiendo que las figuras que le acompañan son sensibles al arte del diseño, ha encargado su traje de luces a la firma de moda sevillana Antonio García.

Enrique Ponce es fiel al modista Lorenzo Caprile que le ha vestido en varias ocasiones especiales a lo largo de su carrera, la más reciente en la pasada Feria de la Magdalena donde conmemoró sus 25 años en los ruedos. Por su parte, Manzanares es, con permiso de Cayetano Rivera, el torero más fashion. Sus colaboraciones con Givenchy y Dolce & Gabbana y las portadas y editoriales de las revistas especializadas le han convertido en un icono de estilo sin precedentes. Durante esta temporada, por el luto de su padre, vestirá traje negro en cada una de sus citas taurinas.

Los diseñadores Fernando y Antonio García con el traje que han creado para Lama de Góngora
Los diseñadores Fernando y Antonio García posan con el traje de Lama de Góngora

Para la firma Antonio García también se trata de una alternativa pues el mundo del toro y su traje les era ajeno hasta ahora. Los hermanos Antonio y Fernando han trabajado su creatividad desde la limitación de un patrón inamovible como es el del traje de torero, de ahí que hayan centrado sus esfuerzos en los bordados inspirados en molduras sevillanas. «Estamos entusiasmados con el resultado porque es precioso y, además, tiene mucha identidad de nuestra marca por ese baile de lazos afrancesados que cubren el cuerpo del torero», explicó Fernando García a ABC Sevilla, reciente ganador del Goya al mejor vestuario por La Isla Mínima.

De las conversaciones entre los diseñadores y Lama de Góngora nace un traje «que es un juego entre lo geométrico y lo orgánico». Para el novillero, esos originales lazos simbolizan la unión con su ciudad, Sevilla. Cordón de oro, brocado, canutillo y cristal son algunos de los elementos elegidos y el color, por supuesto, es el blanco. «Además, hemos metido perlas y perlas doradas, algo que no se había hecho aún», recuerda el diseñador. Para Fernando, el de la alternativa de Lama de Góngora, es un traje «especial, elegante y un poco femenino», sensaciones inspiradas por el arte del toro.

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