Este nuevo proyecto gastronómico, el restaurante La Bernarda, se emplaza en lo que originariamente fue un antiguo almacén de productos que llegaban de América, ubicado en el mítico barrio de San Bernardo.
La Bernarda en Sevilla, cuyo nombre proviene del barrio donde surge, apuesta por el equilibrio entre una cuidada decoración y una cocina de mercado con tradición y técnicas de alta cocina. En definitiva, hablamos de un entorno actual y contemporáneo con un servicio esmerado y atento, donde poder disfrutar de momentos inolvidables.
Se define a sí mismo como un slow bar, siguiendo un movimiento en restauración en el que se pretende combinar placer y cultura, un lugar al que se va a comer sin prisas, ideal para disfrutar y desconectar.
Este slow bar La Bernarda, fue antes almacén ferroviario que han conseguido remodelar y convertir en un agradable comedor de estilo vintage y con una vegetación exuberante.
Interior del Restaurante La Bernarda
Carta del slow bar La Bernarda
La Bernarda en Sevilla sigue un estilo de tapas originales con sabrosura y buena mano en la cocina. La carta está dirigida por Cristobal García, que ha pasado por varios fogones entre los que se cuenta alguna estrella Michelin. La oferta se presenta en varios apartados divididos por Abriendo boca, Agua y sal, y Terruño y pasto, además de las Cositas dulces. De su carta destacan las gambas al jerez sobre crema de ajo confitado, el bikini pita de cola de toro o ensalada crujiente en escabeche de módena. Los más golosos no deben irse del restaurante La Bernarda sin probar la cuajada de rosas.
Bikini de cola de toro del Restaurante La Bernarda