Bacalao a la romana

El bacalao, al igual que cualquier pescado blanco, se caracteriza por su escaso contenido graso

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Esta receta de bacalao a la romana es una manera muy sencilla de preparar este popular y saludable pescado blanco. También puedes servirlo como aperitivo cortado en taquitos y acompañado con una salsa ali-oli.

Así lo cocinamos

Antes que nada debes desalar el bacalao: Remójalo en una cazuela con agua fría dentro del frigorífico durante 1 día, cambiando el agua 3 ó 4 veces.Una vez desalado, córtalo en tacos (con piel) y sécalo bien con papel absorbente.Pasa el bacalao por harina y huevo batido.Para freírlos necesitaremos una sartén con abundante aceite de oliva muy caliente.Introduce en el aceite los trozos de bacalao y fríelos hasta que queden bien dorados.Sácalos con una espumadera y deposítalos sobre papel de cocina para eliminar el exceso de aceite procedente de la fritura.Sirve bien caliente y espolvorea con perejil picado.

Trucos y Consejos

Para acompañar este bacalao puedes preparar una salsa ali-oli, que irá estupendamente con este plato.

Información Nutricional

El bacalao, al igual que cualquier pescado blanco, se caracteriza por su escaso contenido graso. Su consumo supone una fuente de alto valor biológico, así como de diversos minerales (potasio, fósforo, sodio, calcio y magnesio) y vitaminas del grupo B.Si controlamos la cantidad de aceite al elaborar esta receta, el valor energético de la misma no será demasiado elevado.En esta receta, el bacalao se cocina rebozado, por lo que el contenido graso y calórico del plato va a verse incrementado. Por este motivo conviene que las personas que presenten un exceso de peso, la cocinen con otra técnica culinaria menos grasa como puede ser al horno.Datos nutricionales del bacalao salado:

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