Diez sitios para comer bien y barato en Córdoba (II)
Actualizado: GuardarCasa Santos
Por 2,50€ vale la pena probar la tortilla más famosa de Córdoba, con sus quince centímetros de altura, veinte huevos y cinco kilos de patatas. Comérsela al pie del muro este de la Mezquita-Catedral no tiene precio.
Aparte de la pantagruélica tortilla, esta taberna fundada en 1966 sirve clásicos de la cocina cordobesa como el salmorejo, la ensaladilla o los boquerones en vinagre. También se pueden degustar tapas calientes como la carne con tomate o la carrillada en salsa.
Y todo ello a precios populares, teniendo en cuenta su ubicación en uno de los lugares más turísticos de la ciudad.
Calle Magistral González Francés, 3
El Astronauta
El menú diario de El Astronauta, al inicio de la calle Diario de Córdoba, es una buena opción para comer cerca de Capitulares de lunes a viernes, en un ambiente moderno y a la vez cálido.
Por 10€ ofrecen un menú compuesto por primero, segundo, bebida y postre. Si no hay mucha apetito se puede optar por medio menú, con un solo plato y postre, una opción cada vez más demandada por los clientes, que sale por 7€. Incluso tienen menú para cenar de lunes a jueves y sábado al mediodía.
En su oferta gastronómica destacan las hamburguesas y la mousaka de cordero, un clásico que se mantiene en carta desde hace una década. También cuentan con opciones vegetarianas, como el hummus, la hamburguesa de garbanzos y habas o el salmorejo de tomate y aguacate.
Calle Diario De Córdoba, 18
El Globo
La tarifa plana llegó al mundo de la gastronomía cordobesa con El Globo, situado al comienzo de la avenida de El Brillante.
En El Globo los platos tienen un precio fijo de 7,95€, si se trata de platos para compartir, y 9,95€ si son platos individuales. Se puede elegir entre una gran variedad de opciones que presentan un buen equilibrio entre calidad y precio, agrupadas en entrantes, ensaladas y verduras, pescados y carnes.
Los postres también tienen un precio único de 5,95€ y también ofrecen platos para satisfacer al público infantil a 7,95€. La carta cambia varias veces a lo largo del año en función de la temporada, por lo que en El Globo no hay lugar para el aburrimiento.
Avenida del Brillante, 1
La Bicicleta
Las famosas tostas –de aguacate con ventresca, de salmón ahumado…– hacen las delicias de sus clientes, quienes tampoco se pueden resistir a un buen zumo. Natural y hecho al momento, por supuesto, y todo ello sazonado con buena música.
Tienen opciones para veganos y las tartas caseras son un pecado mortal. El hummus y la tabla de quesos son otros de los imprescindibles de este local de ambiente informal, cercano a La Ribera, decorado con bicicletas y donde te invitan a una cerveza si llegas en bici.
En definitiva, sabor, calidad y originalidad a precios muy ajustados.
Calle Cardenal González, 1
La Cazuela de La Espartería
De camino hacia la plaza de La Corredera, es parada obligada La Cazuela de La Espartería. En sus 20 años de vida, La Cazuela ha sido capaz de conjugar sabiamente clásicos de la gastronomía local como el flamenquín, el salmorejo y el rabo de toro con propuestas originales que la diferencian de otras tabernas, como el cordefrito, las berenjenas con salmón, el lomo de orza con torta de Zújar o las alcachofas con rabo de toro.
Buena carta de vinos, con predominio del Montilla-Moriles, y una inmejorable relación calidad-precio completan la carta de presentación de este joven clásico.
Calle Rodríguez Marín, 16
La Fabbrica Pizzería
Un lugar único y diferente en Córdoba, en el que poder tomar una estupenda pizza hecha a mano, fresca y de calidad por un módico precio. A la decena de pizzas que ofrecen hay que añadir la posibilidad de componer la tuya propia, de hasta cinco ingredientes. También figuran en su carta platos generosos de auténtica cocina italiana como ensaladas, lasaña, empanadas, quesos y vinos. Cada día ofrecen postre distintos, pero siempre de elaboración casera.
La decoración de este local de Ciudad Jardín llama la atención por su sencillez, con toques vintage y al mismo tiempo muy diferente de otros restaurantes. Suele ser difícil encontrar mesa, por lo que se hace imprescindible reservar con antelación.
Calle Albéniz, 16
La Tapería
Resulta una agradable sorpresa encontrar un menú del día tan completo y variado en el entorno de la Mezquita-Catedral.
El menú se compone de cinco primeros, cinco segundos y tres postres, además de una bebida y pan. El cliente también puede optar por el menú Tapería, que incluye cinco tapas para compartir entre dos personas, bebida, pan, café o postre.
En poco tiempo, La Tapería se ha hecho un hueco en la Judería gracias a su cuidada ambientación, buenos precios y una oferta gastronómica tradicional con un toque renovado, con platos como el tartar de rabo de toro, el salmorejo de espárragos o la ensaladilla de gambas.
Calle Romero, 4
La Tranquera
La Tranquera es un rincón hispano-argentino en pleno casco histórico, pequeño pero acogedor, donde disfrutar de platos de ambos lados del océano para un contraste de sabores sorprendente.
Así, el comensal puede optar por los sabores argentinos –parrillada de carne, provoletta, empanadas, choripán…– sin renunciar a los clásicos cordobeses –flamenquín, churrasco cordobés, presa ibérica a la brasa–.
Las raciones son generosas y a precios realmente competitivos. Es recomendable reservar, pues sus mesas suelen estar muy solicitadas.
Calle Cardenal Gonzalez, 53
Taberna El Gallo
El Gallo es una taberna muy popular para tapear junto al Ayuntamiento por su sabor tradicional, sus grandes vinos de Montilla-Moriles, de su propia bodega, y sus precios asequibles.
No se pueden dejar de probar sus gambas rebozadas, la especialidad de la casa, el queso o la tortilla de patatas.
Se trata de una taberna “de toda la vida”, no apta para quienes anden buscando sofisticación y diseño. Sentarse en las mesas de dentro y tocar el timbre para llamar al camarero es toda una experiencia.
Calle María Cristina, 6
Taberna Regina
Las patatas bravas han dado justa fama a la Taberna Regina, una de las más antiguas de la ciudad, enclavada en una castiza plazuela a medio camino entre San Pedro y La Magdalena.
Aquí es posible tapear a precios muy competitivos en un entorno encantador, al rumor de la fuente de agua fresca y a la sombra de los naranjos. En el interior conserva un auténtico patio cordobés bien conservado, y mientras dura el frío habilitan las salas independientes con braseros bajo las mesas.
Su cocina se basa en especialidades de la gastronomía autóctona como el chorizo al vino, los callos, el rabo de toro y, por descontado el salmorejo y el flamenquín; todas ellas regadas con los vinos generosos de las Bodegas Gracia Hermanos, de Montilla.
Plaza de Regina, s/n
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