Hazte premium Hazte premium

COMENTARIOS REALES

Altos cargos y votantes

Los ciudadanos no están obligados a votar siempre por las mismas siglas y la vergüenza propia es peor que la ajena

Pleno en la Asamblea de Madrid con la comparecencia de Cristina Cifuentes MAYA BALANYA
Fernando Iwasaki

Esta funcionalidad es sólo para registrados

El bochornoso episodio del pseudo-máster de Cristina Cifuentes ha dejado en evidencia los abismos que separan a los altos cargos de su propia militancia partidaria y a la vez de sus resignados votantes, porque no se entiende que por salvar a Cristina Cifuentes el Partido Popular esté dispuesto a perder los votos de cientos de miles de ciudadanos, indignados por el injusto trato de favor recibido por la presidenta de la comunidad de Madrid y horrorizados por las mentiras que un día sí y otro también aparecen en torno al pseudo-máster de Cristina Cifuentes.

Para que un estudiante —cualquier estudiante— apruebe un máster, no basta con pagar las tasas. Hay que cumplir los requisitos de admisión, matricularse en plazo, asistir al 80% de horas lectivas, aprobar los exámenes de las distintas asignaturas y defender un Trabajo de Fin de Máster (TFM) ante un tribunal compuesto por tres profesores. Que sepamos, Cristina Cifuentes no ha cumplido con ninguna de estas condiciones y sin embargo repite contumaz que su máster es real. ¿En qué se basa? Sin duda en aquella máxima popular que dice que lo que se regala no se quita. Por eso hablo de un pseudo-máster.

Me parece comprensible que los altos cargos de un partido se respalden mutuamente y comprendo que a los militantes del mismo partido no les quede más remedio que tragarse los sapos de los errores de sus altos cargos, pero se equivocan quienes piensen que los votantes del Partido Popular lo son incondicionalmente, a pesar de la corrupción y de episodios como lo del pseudo-máster. ¿Cuántas familias que votan por el Partido Popular hacen sacrificios para que sus hijos cursen un máster? ¿Cuántos profesores universitarios que votan por el Partido Popular son incapaces de regalar una nota o de falsificar una firma? El votante del Partido Popular no goza del abrigo del aparato ni de la protección de un alto cargo. No. El votante del Partido Popular muchas veces lo es a pesar de un entorno adverso y hostil, y lacras como la corrupción y el pseudo-máster no sólo lo asquean y le repugnan, sino que lo dejan a merced de todo tipo de pitorreos y denuestos.

Aunque Cristina Cifuentes dimitiera antes de 24 horas, el prestigio de la Universidad Rey Juan Carlos está por los suelos, la honradez de sus profesores en entredicho, la legalidad de sus posgrados ya es dudosa y la indignación de sus estudiantes absolutamente legítima. Por cierto que todo puede empeorar todavía, porque Cristina Cifuentes se presenta como «víctima» de la ineficacia de la Universidad Rey Juan Carlos y todo indica que no le importaría hundirse con la universidad y la Comunidad de Madrid, antes que dar su brazo a torcer.

Comprendo que un alto cargo —con honrosas excepciones— ya no tenga adónde ir después de salir por la puerta falsa, pero los ciudadanos no están obligados a votar siempre por las mismas siglas y la vergüenza propia es peor que la ajena.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación