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Patrimonio

Un trozo de Inglaterra en Alcalá

La antigua y singular estación de bombeo del Adufe será objeto de obras de restauración

Un trozo de Inglaterra en Alcalá

A. Mallado

Es un trozo de Inglaterra anclado en Alcalá de Guadaíra, junto a su río y en un hermoso entorno natural. La Estación de Bombeo de Adufe Bajo es un alto edificio de ladrillo rojo que por su estética no debería estar en este lugar . La historia lo explica, lo construyó en 1887 la compañía inglesa The Seville Water Works Company Limited, con un objetivo muy concreto, suministrar agua potable a Sevilla. Ahora, Emasesa anuncia la rehabilitación de un edificio con gran potencial turístico.

El volumen y la notoriedad de su construcción se explican por su función. Era una pieza clave para que los habitantes de la capital pudieran beber, en un momento en el que el suministro de agua era uno de los grandes problemas de Sevilla. Para ello se empleaba, entre otras fuentes, el agua de los abundantes manantiales del subsuelo de Sevilla. Esta estación tenía la función de impulsar el agua hacia Sevilla y estaba acompañada de un sistema de canalizaciones.

La empresa inglesa que construyó las instalaciones fue la concesionaria de suministrar agua potable a Sevilla hasta 1957 . El edificio es por tanto un ejemplo muy interesante de arquitectura industrial, que además de la construcción conserva el sistema de bombas y la maquinaria asociada.

La primera fase de su rehabilitación, tiene un presupuesto de casi un millón de euros y consistirá en la consolidación, realce y refuerzo estructural del edificio . Se asegurará el terreno y la cimentación del edificio, para pasar luego a la reparación estructural y por último al arreglo de las fisuras de los muros y bóvedas. La intervención tiene una duración de diez meses. Se respetará la fachada portante y la tipología estructural.

Este edificio ha sido de forma recurrente incluido en proyectos turísticos y medioambientales por parte del Ayuntamiento de Alcalá . Su ubicación, muy próxima al casco urbano, justo frente a un molino, al lado el río y en la orilla del corredor verde que lleva hasta la Pablo de Olavide, hacen evidente su potencialidad en este sentido. En su día, el alcalde de Alcalá, Gutiérrez Limones manifestó su intención de que el edificio albergará un Museo del Agua que interpretará la relación de la ciudad con este medio que brota en forma de manantiales en diversos puntos, se emplea como  fuerza motriz en los molinos o circula por todo su suelo a través de un monumental acueducto subterráneo cuyos primeros tramos se construyeron en época romana.

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