Cierre de oro para una Semana Santa de ensueño

La Hermandad del Santo Entierro puso el broche de oro este Sábado Santo a la Semana Santa de Dos Hermanas, con la realización de su estación de penitencia por las calles de la ciudad nazarena. La sobriedad de esta cofradía con el Cristo Yacente y la Virgen de la Soledad marcaron el ritmo del cortejo procesional que inició su recorrido a las siete de la tarde desde la parroquia de Santa María Magdalena.

Pese a que los cielos se mantuvieron nublados en muchas ocasiones y las temperaturas descendieron considerablemente, la tarde del Sábado Santo transcurrió en Dos Hermanas dejando bellas estampas al paso de esta cofradía por calles engalanadas para la ocasión como en Manuel de Falla, donde desde uno de los balcones el artista nazareno Manuel Lombo cantó una saeta a la Virgen de la Soledad.

Los niños de monaguillos fueron dando, desde luego, el toque de color al cortejo en el que se pudo ver también al presidente del Consejo de Hermandades y Cofradías de Dos Hermanas, Antonio Gavala, en la que fue su primera salida con el Santo Entierro ostentando su nuevo cargo.

Especialmente llamativas fueron también los motivos heráldicos que lucía la candelería del palio de una Virgen, que fue el punto de todas las miradas, especialmente a su vuelta, ya de noche, cuando regresaba a su templo pasando entonces por la carrera oficial a los sones de la Banda de Música del Maestro Tejero.

El Santo Entierro ponía así el broche de oro a una Semana Santa plena en Dos Hermanas, en la que han podido realizar su estación de penitencia las diez hermandades nazarenas, además de la Agrupación Parroquial de las Tres Caídas, que salió el Sábado de Pasión. El tiempo ha acompañado a cada una de las cofradías durante su estancia en la calle dejando en su recorrido estampas memorables.