Muere una joven sevillana mientras practicaba submarinismo en Bali

Nadie podía pensar que Ana encontraría la muerte en Bali, uno de los paraísos para quienes aman el submarinismo. El pasado 20 de agosto Ana María Gata González de 40 años y vecina de Dos Hermanas, fallecía cuando practicaba uno de sus deportes favoritos. Había elegido Bali para pasar , junto con un grupo de amigos, sus vacaciones. Ese trágico día el grupo se había preparado para hacer una inmersión , igual que el día anterior. Pero algo fue mal. Ana comenzó a no sentirse bien y a pesar de que fue atendida por tres médicos, falleció de forma repentina a consecuencia de un neumotórax . Casi una semana después, su familia espera repatriar el cadáver de la joven, un proceso que se ha visto retrasado por «motivos técnicos» . Y es que, como explica su hermano Víctor, el hecho de que su muerte se produjera en un lugar tan remoto como la isla Flores, a 800 kilómetros de Bali —que está formada por 17.000 islas— es lo que ha provocado que los trámites se hayan prolongado , si bien está previsto que su cuerpo llegue durante esta semana .

«Ella ha muerto haciendo lo que quería , era una persona de espíritu libre», recuerda su hermano que quiso agradecer las muestras de apoyo recibida.

Ana cumplió 40 años hace pocos meses y era propietaria de una óptica en Dos Hermanas. La noticia ha caído como un jarro de agua fría entre los vecinos de la localidad, ya que la fallecida pertenece a una familia muy conocida en la ciudad. Ana tenía experiencia en hacer submarinismo (de hecho entre las personas que la acompañaban había una monitora de buceo, amiga suya) así como también prácticaba otros desportes más extremos como la escalada . Quien la conoce sabe que Ana no era una persona convencional . Precisamente ese espíritu aventurero que llevaba a gala es el que la llevó a elegir como destino Bali. También había estado en otros lugar como Madagascar y las Islas Salomón.