Un único bombero de guardia en todo el parque de Los Palacios

El cuerpo de bomberos de Los Palacios y Villafranca se queja de que no puede desempeñar su trabajo con las garantías mínimas necesarias. Un paseo por sus instalaciones revela que en el parque de bomberos palaciego el mobiliario es comprado por los propios trabajadores y muchas de las taquillas han sido cogidas de la basura y otras de elaboración casera.

También las máquinas que componen el gimnasio han sido compradas por ellos mismos; los colchones que utilizan para descansar en las guardias son los desechados por el parque de bomberos de Dos Hermanas; hay humedades y goteos por muchas zonas incluyendo la parte en la que se encuentra el cuadro eléctrico, con la posibilidad de cortocircuito que ello supone y el consiguiente riesgo de dejar el parque sin suministro eléctrico.

Todas estas carencias y algunas otras fueron denunciadas en una inspección de Trabajo, la cual concluyó con una instancia al consistorio palaciego a tomar medidas al respecto en un plazo máximo de dos meses.

«Pedimos mejores condiciones laborales, que se creen plazas de trabajo para que seamos más. Hemos llegado a estar uno solo de guardia, con todo el riesgo para la seguridad ciudadana que ello conlleva», afirma Raúl Álvarez, uno de los trabajadores afectados, a los que se les adeudan siete nóminas. Es más, cuando desde el parque de bomberos de Utrera requieren los servicios del de Los Palacios el pueblo se queda «vendido», sin ningún bombero.

Estas salidas a la localidad vecina están encuadradas dentro del Sistema Provincial de Bomberos, un convenio entre la Diputación de Sevilla y los ayuntamientos de los municipios de la provincia a través del cual los correspondientes cuerpos de bomberos cooperan fuera de su término municipal a cambio de una subvención económica. Por este concepto el ayuntamiento de Los Palacios recibe este año 168.000 euros.

Según Antonio Fernández, otro afectado, «ese dinero es en teoría para el mantenimiento del parque de bomberos, en cambio nosotros no vemos ni un euro invertido en las instalaciones. Se limitan a cubrir los gastos del combustible, las facturas de luz y agua de la nave y los gastos de telefonía».

Afirmación que Manuel Begines, concejal delegado de Seguridad Ciudadana, matiza: «Es una asignación destinada a la mejora del funcionamiento del servicio contra incendios, pero no es una cuenta restringida, tenemos la facultad de incluirla en la caja única».

Pese a las dificultades, Begines atisba un poco de luz: «Hace dos meses conseguimos el compromiso por parte de Diputación de que van a hacer una obra importante de reforma. Calculo que en condiciones normales en un mes pueden empezar las obras».