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HEMEROTECA

Colección gráfica de ABC: la antigua fachada del Museo

El edificio del antiguo convento de la Merced en una fotografía del último tercio del siglo XIX

Colección gráfica de ABC: la antigua fachada del Museo JEAN LAURENT / ARCHIVO ABC

FRANÇOIS GUITARD

Irreconocible incluso para los más avezados en la historia patrimonial de la ciudad, la Colección gráfica de ABC muestra una imagen de la fachada del hoy Museo de Bellas Artes tomada por el fotógrafo francés Jean Laurent hacia 1870. En el rótulo del edificio se lee la inscripción «Museo Provincial».

Preside la estampa la estatua de Bartolomé Esteban Murillo, original del escultor madrileño Sabino de Medina instalada en 1864 en la plaza en fecha anterior a la copia exacta situada en la puerta sur del Museo del Prado donde el pintor sevillano comparte honores con Velázquez y Goya, los otros artistas con estatua en los accesos a la pinacoteca madrileña.

La fachada del Museo de Bellas Artes no se parece en nada a la actual, pero tampoco a la original. El edificio había servido como casa de la orden mercedaria en Sevilla desde su construcción en los primeros años del siglo XVII, según los planos de Juan de Oviedo, hasta 1836 en que los frailes lo abandonan dentro del plan de rescate financiero de la Hacienda pública que desarrolló el ministro Mendizábal con la llamada Desamortización.

En el siglo XIX en que trocó como pinacoteca, también se procedió a reformas arquitectónicas de importancia como las que tuvieron lugar entre 1868 y 1898 para restaurar las arquerías y los muros del primer piso. También se alicataron muchos paños de pared con azulejos procedentes de otros conventos igualmente desamortizados en aquellos años.

El aspecto actual del inmueble obedece a sucesivas intervenciones a lo largo de su historia. En 1729, Miguel de Quintana construyó la portada barroca que hoy conocemos, si bien estaba situada justo en el lado opuesto, en la calle Bailén donde hoy es visible el rastro de ladrillo visto de un arco de medio punto. Esa fachada se trasladó a la plaza en 1943, en unas obras dirigidas por los arquitectos sevillanos Balbontín Orta y Delgado Roig que abrió un patio donde estaba la sacristía y trasladó de sitio la fachada.

Así que lo que hoy vemos como puerta de acceso al museo de Bellas Artes lleva en su sitio poco más de 70 años. La Colección gráfica de ABC ilustra todos estos avatares arquitectónicos.

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