Jornadas en el colegio de médicos de sevilla
¿Qué futuro tienen los médicos andaluces?
De 600 facultativos que emigraron en 2009 se ha pasado a 3.400 el año pasado
Los médicos españoles, y sobre todo los andaluces, no están en su mejor momento. El Colegio de Médicos de Sevilla ha querido profundizar en los problemas que ocupan y preocupan a los facultativos con la celebración este viernes en su sede de la avenida de la Borbolla de unas jornadas que bajo el título «El médico y su entorno profesional», congregó a expertos de diferentes organizaciones y de la judicatura para analizar en mesas redondas temas de interés y actualidad como la forma de encontrar trabajo, el apoyo imprescindible de la sanidad privada, la información clínica y el consentimiento informado o el presente y futuro del ejercicio profesional de la Medicina.
Precisamente este último tema es uno de los que más interés despertó. El futuro se vislumbra a partir de un presente poco esperanzador, sobre todo si se tiene en cuenta que en cinco años se ha quintuplicado el número de médicos que emigran al extranjero para buscarse un porvenir o que, y este es otro dato que llama la atención, Andalucía es la comunidad autónoma que menos aporta de sus presupuestos por habitante y año, concretamente 980 euros frente a los 1.200 que suponen la media nacional.
El portavoz del PP en la comisión de Sanidad en el Senado, Jesús Aguirre Muñoz, lamentó ayer que la inversión andaluza esté muy por debajo de los 1.500 euros que se emplean en el País Vasco, una región, «modélica en la que además, a los médicos se contratan al cien por cien de la jornada y en la que hay sustituciones en tiempo y forma».
Denunció que desde que se hicieron las transferencias sanitarias las condiciones laborales, económicas y profesionales de los médicos en las diferentes comunidades autónomas han evolucionado según el criterio de cada una de ellas provocando falta de equidad para los facultativos y los usuarios, «algo que no debe pasar porque la sanidad y su accesibilidad tiene que ser la misma aquí, que en Madrid que en Valencia».
A eso es a lo que se quiere llegar y a que, por ejemplo, no ocurra, como sucede en la actualidad, que los médicos andaluces y los catalanes aún no hayan cobrado las últimas dos pagas extras — la de verano y la de Navidad— «excepto la parte que aporta el Gobierno de la Nación» o a que sean contratatados al 75% o a que los usuarios tengan acceso a unos u otros medicamentos según en la zona de España en la que vivan. Aguirre apuesta por una única Sanidad en España, y también en Europa, en donde hay dos sistemas: el nórdico y mediterráneo, financiado a través de los impuestos vía Presupuestos Generales del Estado; y, el alemán, en en el que el trabajador aporta a través de su empresa.
Son dos modelos diferentes, dos incentivos o desincentivos para los médicos sobre los que la Unión Europea ya ha dado un toque de atención. No son dos pero sí tres los compromisos que hoy día no desarrollan los médicos en el grado de Medicina, a pesar de la buena formación que tienen, y que ocupan y preocupan al vicepresidente de la Organización Médica Colegial (OMC), Serafín Romero Agüit.
Se trata de la formación continuada, su implicación con el entorno social y la necesidad de que el médico gestione los recursos que le asignan ya que es quien toma decisiones.
Dice Romero Agüit que los estudiantes necesitan impregnarse de esos tres compromisos y no solo ser un buen médico. También destacó el éxodo de profesionales a otros países para trabajar y cómo en 2009 se solicitaron a los colegios 600 certificados de idoneidad, imprescindibles para salir fuera; en 2013 pasaron a 3.400 y en lo que llevamos de año hay ya 3.000. Esto es un problema porque además y, según dijo, no se sabe cuántos médicos se necesitarán para el año que viene porque «han fracasado las políticas de recursos humanos», en un país que es el «segundo en el mundo con más facultades de Medicina, lo que no es calidad, y sí, posiblemente, negocio».
De «desgracia» califica que ahora vayan a salir de las facultades 7.000 médicos y solo haya 6.000 plazas de formación. Pero eso no es lo peor, pues, si bien no hemos previsto que todos nuestros médicos vayan a poder formarse lo grave es que «tampoco se ha previsto que vayan a poder quedarse para desarrollar lo que se invierte en ellos».
Juan Manuel Contreras Ayala, secretario del Colegio de Médicos de Sevilla, se refirió a la preocupación que tiene esta entidad por los problemas de la profesión y afirmó que el presente de la profesión médica es oscuro: paro, recortes, plantillas que se reducen, cada día más usuarios de la sanidad y cierta desconfianza de la pública hacia la privada. En este sentido comentó que casi un tercio de la actividad que se hace de atención al usuario es através de entidades privadas «lo cual nos llena de horror pensar que pasaría si ese tercio tuviera que acudir a los hospitales públicos con problemas, como, por ejemplo, las listas de espera».
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