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La Fiscalía investiga coacciones a policías locales para protestar contra Zoido

Varios agentes denuncian que en una asamblea del SPPME se instó a «pinchar los coches» y «mearse en las taquillas» de quienes no fueran a las movilizaciones

La Fiscalía investiga coacciones a policías locales para protestar contra Zoido rocío ruz

alberto garcía reyes

Pinchar las ruedas de los coches y orinar en las taquillas de los «insumisos». Eso es lo que supuestamente ordenó un miembro del sindicato de la Policía Local de Sevilla, SPPME, al resto de los agentes que asistieron a una asamblea de la Unidad de Motoristas en la que se decidieron las medidas a adoptar contra el gobierno de Juan Ignacio Zoido en el Ayuntamiento. Ante la gravedad de estas presuntas coacciones, la Jefatura de Policía de la ciudad ha dado traslado de los hechos a la Fiscalía.

La historia se remonta a julio de este año. La Unidad de Motoristas, en la que por cierto hay varios agentes imputados por supuestamente cobrar tasas de transportes de vehículos de grandes mercancías fuera de su horario laboral usando el uniforme oficial, llevaba desde el mes de marzo ejerciendo una campaña de movilizaciones contra el gobierno municipal cuyo objetivo principal era conseguir que Zoido les aprobara un plus de peligrosidad en sus nóminas. La queja del sindicato estribaba en que este complemento salarial estaba acordado desde el mandato anterior pero no se ha hecho efectivo. Y tras la muerte del agente Sergio Rodríguez en acto de servicio, las protestas se intensificaron, de manera que se convocó una asamblea en julio para informar a los agentes de esta unidad de las medidas contra el Ayuntamiento que supuestamente proponía el SPPME, según el relato de los denunciantes. Una de ellas fue la llamativa protesta de un policía uniformado en la Plaza Nueva montado en una burra y con casco. «Zoido no cumple», decía una pancarta con la que varios motoristas protestaron a las puertas del Ayuntamiento durante varios días mientras desde el sindicato se anunciaba la posibilidad de dejar las motos en el garaje y patrullar en coche o no renovar los carnés de motocicleta.

Sin embargo, aquella asamblea resultó una sorpresa para muchos de los agente asistentes. Todo estaban de acuerdo con las exigencias que se planteaban al Ayuntamiento. Pero algunos no veían oportunas las medidas de protesta que allí se estaban proponiendo. Y en medio de este debate, surgió la presunta amenaza. Las fuentes consultadas por este periódico certifican que varios agentes se dirigieron a la Jefatura para poner en su conocimiento lo que allí ocurrió. Según este testimonio, un destacado miembro sindical instó a los policías a llevar a cabo las protestas planteadas por el SPPME sin excepción. Y en un momento determinado de su arenga, instó a «pinchar las ruedas de los coches» y a «mearnos en las taquillas» de los que no participaran en las movilizaciones. El Ayuntamiento recibió esta información a través de varios anónimos. Y decidió enviar el relato de los hechos a la Fiscalía porque siempre se señalaba a la misma persona como autor de estas supuestas coacciones.

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