Espadas mantendrá la zona azul en Bami y Nervión tras prometer lo contrario

Primera promesa electoral del socialista Juan Espadas que definitivamente se queda en nada. El alcalde ha terminado claudicando a la lógica legal, de la que se le venía advirtiendo desde la oposición, y desiste en su idea de eliminar la zona azul en varios lugares de la ciudad que había señalado, especialmente en Bami. Allí, el actual equipo de gobierno pretendía eliminar 200 plazas de aparcamiento regulado, liberarlas de la zona azul como había prometido en campaña y en los primeros meses del actual mandato. Sustentando su proyecto, además, en una demanda de los trabajadores de la zona —los del hospital Virgen del Rocío, básicamente—. La idea de Espadas, no obstante, se queda en el cajón por imperativo legal. Un dictamen en contra taxativo por parte del secretario municipal acaba con la iniciativa y, además, demuestra que la propuesta electoral era poco rigurosa .

El secretario general del Ayuntamiento de Sevilla ha emitido un informe en el que concluye que el propósito del gobierno municipal de suprimir 200 plazas de zona azul en Bami y cien plazas en Nervión —entre la avenida de Luis Montoto y la calle Jiménez Aranda— «excede el poder de modificación» del que goza el Consistorio en el contrato que regula la explotación del estacionamiento regulado por precio o zona azul. No existe la opción legal de reducir más el número de plazas de zona azul más allá de un 10% que ya se ha usado en la Pirotecnia. El proyecto, por tanto, no fue más que un brindis al sol del PSOE, que no calibró las limitaciones legales del contrato de las que avisó el PP como partido del gobierno en el anterior mandato, cuando se rubricó el acuerdo con la sociedad Aparcamientos Urbanos de Sevilla (Aussa) para lo que entonces era un aumento de zonas con regulación especial.

En junio de 2014, con el popular Juan Ignacio Zoido como alcalde, entró en vigor la ampliación de la zona azul, que contemplaba casi 190 calles, avenidas y plazas sometidas a esta figura de pago. A través de esta ampliación, Aussa, participada en un 51% por Tussam, pasaba a explotar 7.553 plazas de estacionamiento como zona azul; hasta entonces tenía poco más de 4.100.

La ampliación de la zona azul derivó en un intenso debate público y político con partidarios y detractores, especialmente vinculado al barrio de Bami —pasto de los «gorrillas»— y, sobre todo, tras las promesas socialistas de derogar la iniciativa de Zoido. Tan firme era la idea del nuevo equipo que, al poco de llegar al poder, el concejal de Movilidad y Seguridad, Juan Carlos Cabrera , firmaba en su momento el decreto de «revisión» de la ampliación de la zona azul. Dicho decreto contempla la «supresión» directa de 545 plazas de zona azul en el entorno del campus universitario de Pirotecnia, aspecto ya consumado, 200 plazas en Bami y cien plazas en Nervión. En los dos últimos casos, agua. Haciéndose el camino, además, del revés, pues se rubricó el decreto incluso antes de conocerse los límites legales.

En su informe, al que tuvo acceso ABC, el secretario advierte de que es imposible excederse en el «poder de modificación» y recuerda las «diversas resoluciones» que han «delimitado» la zona azul con las consecuentes «modificaciones de las previsiones iniciales del contrato», que copaban ese 10% que se admitía. Las medidas propuestas en Bami y Nervión «sobrepasan ampliamente el porcentaje del diez por ciento recogido en el pliego de condiciones técnicas».

Para compensar, el Ayuntamiento anunciaba ayer una rebaja de precios y el aumento de los tiempos máximos de estancia en las plazas de aparcamiento regulado de Bami, una posibilidad permitida que deja al contrato «prácticamente en el límite» . Esto se hace modificando la catalogación de las calles, para que pasen a formar parte de vías de menor rango y, por tanto, de precios más bajos en lo que a zona azul se refiere. Eso sí, se juega ya al límite legal, como admitió el propio delegado de Movilidad. De este modo, se suprimirán las 128 plazas de muy alta rotación (MAR) en ese barrio, que pasarán a ser zona azul. Asimismo, las 929 plazas con la categoría de zona azul pasarán a ser zona verde, la más económica, con lo que el 91% de las plazas de aparcamiento de Bami serán zona verde. A tal efecto, el Ayuntamiento calcula una reducción de entre un 20% y un 30% en los costes que afrontan los usuarios. Además, se anunció que se mantiene firme la idea de reservar a los trabajadores de la zona al menos una planta del aparcamiento subterráneo de la plaza de Rafael Salgado una vez el mismo entre en servicio. Cabría matizar, una vez visto este antecedente, que habrá que esperar la respuesta de la empresa de ese parking, que se encuentra en administración concursal.

Como era de esperar, el exalcalde y portavoz de los populares, Juan Ignacio Zoido, tardó poco en criticar al alcalde por su «promesa incumplida». « Espadas no ha cumplido lo que dijo . No ha podido hacer lo que prometió y de eso él es el único responsable», recalcó el responsable del PPlocal, quien recordó que el contrato que regula la explotación de la zona azul es plenamente «público» y los socialistas eran conscientes de sus términos. Participa Sevilla, por su lado, criticó que la mesa de movilidad, reunida ayer para dar a conocer el informe del secretario, «sólo sirve para enterarnos de las cosas que ya están decididas, no hay participación alguna ».