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Hacienda censura a Espadas por exceder el gasto legal en personal

El Gobierno le avisa de que invierte 11 millones más de lo que permite la Ley, pero el Ayuntamiento discrepa y el PSOE va a pedir un cambio en la norma

El alcalde de Sevilla, Juan Espadas Juan Flores

ALBERTO GARCÍA REYES

El Ayuntamiento de Sevilla gasta actualmente en contratos de personal, tanto funcionarios como asesores, 10.900.000 euros más de lo que permite la Ley de Presupuestos del Estado, razón por la que el Ministerio de Hacienda emitió el pasado 22 de julio un informe en el que insta al alcalde a reajustar esta situación. Según el escrito registrado en el Ayuntamiento por la Delegación del Gobierno, «al comparar los presupuestos del año 2016 con los del año 2015 resulta un incremento del capítulo de gastos de personal, de acuerdo con la información que tiene esta Delegación del Gobierno, de 11.134.590 euros». Esta conclusión se obtiene a partir de un informe del interventor municipal, emitido el 13 de mayo, en el que se concluye que «en algunos casos, el incremento real supera al que se establece en el artículo 19» de la Ley de Presupuestos. Este escrito del alto funcionario se amplió una semana después con las alegaciones de las distintas empresas municipales, ya que todas ellas superan el límite legal. Lipasam, por ejemplo, tiene un incremento del 4,47 por ciento, cuando la Ley sólo permite una subida anual del uno por ciento.

El interventor aclara que en este apartado hay que incluir «al personal laboral y funcionario de plantillas del Ayuntamiento, personal eventual, directivo y órganos de gobierno», por lo que el resultado final da un incremento de 10,9 millones, lo que supone un 5,84 por ciento más de lo permitido. En consecuencia, el funcionario sentencia que «este incremento no se encuentra justificado, ya que de conformidad con la Ley de Presupuestos la subida salarial máxima es del 1 por ciento para 2016».

El Gobierno municipal, sin embargo, no está de acuerdo con estos datos y ha contestado ya oficialmente a Hacienda que la subida salarial no supera el uno por ciento estipulado por Ley. Para respaldar esta aseveración aporta un informe del jefe de servicio de Recursos Humanos en el que, según este cargo designado por el alcalde, el incremento se ajusta plenamente a la normativa. En concreto, Tussam habría tenido una subida del 0,99, Emvisesa una del 0,97 y Lipasam otra del 0,99. No obstante, el PSOE llevará hoy una moción al Pleno para denunciar las políticas restrictivas del Estado y pedirá que se cambie la norma.

En un informe sobre los gastos de personal que hizo el interventor en febrero de este año ya analizó la memoria del presupuesto elaborada por el PSOE en la que se indicaba que el capítulo de personal crecía en 2,1 millones, lo que suponía en teoría una subida del 0,7 por ciento respecto a 2015. José Miguel Braojos desmontó estos datos aclarando que en este capítulo entran todos los conceptos retributivos, ya que el gobierno había dejado fuera algunos para no visibilizar la polémica subida. Reiteraba entonces el interventor que «sólo se puede comparar en términos de homogeneidad el anexo de personal, que es el que aglutina las retribuciones de todo el personal laboral y funcionario de la plantilla del Ayuntamiento, sea cual sea su relación jurídica, así como el personal eventual, directivo y de órganos de gobierno». Si se computa todo esto, la dotación total es de 197,5 millones de euros, 10,9 más que el año pasado, por lo que el incremento es del citado 5,83 por ciento.

Esto implica que el Ayuntamiento no sólo tiene cerrado el cupo de contrataciones para este año, sino que para ajustarse a la Ley tendría que recortar sueldos o amortizar puestos. Sin embargo, la intención de Espadas es seguir ampliando la plantilla tras un acuerdo alcanzado con los sindicatos para cubrir las vacantes que existen actualmente. La llamada «tasa de reposición cero», que es una resolución del Estado que impide hacer nuevos contratos a las administraciones públicas, sigue vigente y, además, se ha superado el margen de crecimiento legal a pesar de que Espadas limitó los sueldos de los cargos directivos a 59.000 euros. El problema, por tanto, no está en los salarios, sino en el exceso de personas contratadas.

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