Hazte premium Hazte premium

Manuel Torres: «Hay que aclarar la financiación de la mezquita que promueven en Sevilla»

Este profesor de la Universidad Pablo de Olavide es uno de los mayores expertos españoles en terrorismo yihadista

Este docente forma a profesionales de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado Rocío Ruz

M. J. PEREIRA

Manuel Torres (Jaén, 1978), profesor de los grados de Ciencias Políticas y Criminología en la Universidad Pablo de Olavide (UPO) , es uno de los mayores expertos de España en terrorismo yihadista. Imparte el diploma de referencia en España sobre terrorismo: «Análisis de terrorismo yihadista, insurgencias y movimientos radicales». Además, en la Universidad de Granada es profesor del máster de Estudios Estratégicos y Seguridad Internacional , donde imparte la asignatura de «Ciberguerra y gestión estratégica de la información». Autor de libros como « Al Andalus 2.0. La ciberyihad contra España» y «El eco del terror. Ideología y propaganda en el terrorismo yihadista» , se especializó en este tipo de terrorismo cuando inició en 2002 su tesis doctoral tras los atentados del 11-S y la centró sobre la actividad propagandística de los yihadistas en internet. Su grado de especialización le ha convertido en un colaborador de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, tanto en actividades de análisis como formativas.

Usted es experto en la guerra santa que llevan a cabo los musulmanes radicales. Antes era Al Qaeda, ahora el Estado Islámico (Isis). ¿Diría que es el mismo perro con distinto collar?

Tienen los mismos objetivos, legitiman la misma violencia... Realmente estamos hablando del mismo fenómeno, que es el yihadismo terrorista, que se configura a nivel de organizaciones de diferentes formas. Hasta ahora había una especie de liderazgo que tenía Osama Bin Laden, pero tras su muerte, se acentúa esta diferencia, hasta el punto de que Isis y Al Qaeda están enfrentados sobre quién está llevando realmente la yihad. Al Qaeda se ha movido en la clandestinidad, ha hecho atentados... mientras que Estado Islámico ha decidido refundar el Califato y no sólo ataca a su enemigo sino que gestiona millones de personas que están bajo su control, de forma que tienen un caudal de recursos que Al Qaeda nunca ha tenido. Al Qaeda se ha visto oscurecida por los éxitos de Estado Islámico en Siria e Iraq, donde ha controlado territorios. Igual que ahora están fracturados, el Estado Islámico y Al Qaeda pueden terminan reuniéndose o distanciarse más.

Con la pérdida de territorios por parte de Isis, ¿la yihad se recrudecerá dentro de Europa?

Ellos han dejado muy claro en su actividad comunicativa que Europa nunca ha dejado de ser un objetivo. Llevan anunciando ataques desde hace años. Pensábamos que mientras que les fueran bien en Siria no prestarían mucha atención a Europa pero eso ha sido un error de análisis. La verdad es que siempre estuvo en su objetivo atacar en paralelo. Ese terrorismo se ha manifestado en Occidente coincidiendo con la pérdida de territorio pero habrían seguido atacando en Europa aunque les hubiese ido bien en Siria.

Muhammad Yasin Ahram Pérez, alias «El Cordobés», se ha hecho famoso tras el vídeo que difundió en nombre de Isis. ¿Cómo pudo radicalizarse un chico de madre española que se crió en Córdoba?

Lo que explica la radicalización de ese hombre es que sus propios progenitores fueron los primeros interesados en insertarle esa visión. La radicalización le ha llegado de su núcleo familiar. El Cordobés se crió en el seno de una familia musulmana, pero hay casos de conversos, que no son precisamente anecdóticos, que descubren el islam siendo adultos y transforman su vida porque han recibido un mensaje de quiénes son, quién es su grupo de referencia y cuál es su papel en la vida.

«Con el permiso de Ala, Al Andalus volverá a ser lo que fue: tierra de Califato», decía «El Cordobés» en su video. Este mensaje de Isis no es nuevo, ya lo reivindicó Al Qaeda y Bin Laden. ¿Para ellos Al Andalus incluye Sevilla, Córdoba y Ceuta o el antiguo Califato omeya, que incluía Zaragoza y Portugal hasta Oporto?

Para ellos, Al Andalus es cualquier territorio de la península ibérica que algún momento haya estado bajo dominio del islam, por lo que incluye la práctica totalidad de España y Portugal.

Torres, en la Universidad Pablo de Olavide donde imparte clases Rocío Ruz

En las redes sociales se han mofado de «El Cordobés».

Hay que negar la solemnidad que este tipo de personas quieren arrogarse pero sin olvidar que pertenecen a una organización que mata. Eso es compatible con no caer en el pánico y miedo que quieren inculcar en su enemigo.

En Sevilla hay zonas que concentran comunidades musulmanas ¿Demuestra eso que no se han integrado en la sociedad sevillana?

¿Están allí porque quieren o porque no tienen capacidad económica para ir a otro barrio?

Ahora la comunidad musulmana de Sevilla admite que necesitan un control de los imanes. ¿Cómo debería articularse ese control?

Esto también es muy complicado porque a veces cuando pensamos en el islam le damos las mismas cualidades que tiene la religión católica y pensamos que los imanes son nuestros curas y no lo son porque en el islam no hay un clero, sino que el musulmán se auto organiza, lo que explica la multitud de ramas. Los imanes no son más que musulmanes que dirigen el rezo. Algunas comunidades, sobre todo las que tiene más dinero, profesionalizan esa tarea contratando a imanes para el rezo, clases de religión... De forma que cada comunidad decide a quién se contrata como imán y con qué criterios. El principal problema con el que se enfrentan las comunidades musulmanas en España es el dinero porque tener una mezquita o un imán supone pagar un alquiler o un salario. Hay países con mucho dinero que están dispuestos a pagar eso para influenciar el islam según la versión que ellos prefieren.

Promueven una mezquita en Sevilla cuya financiación es dudosa. ¿Debe autorizarse esa mezquita sin conocer el origen del dinero?

Debemos exigir transparencia y claridad sobre el origen del dinero para una mezquita, una casa de la cultura o un centro social. Lo que más puede beneficiar a las comunidades musulmanas de España es la transparencia y aclarar de dónde proceden el dinero que reciben. Deberíamos rechazar que determinados países que exportan unas interpretaciones del islam que chocan con los valores básicos de España puedan financiar a comunidades musulmanas. Esto es un problema de fractura social. Debemos armarnos contra quienes imparten la visión de que vivir el islam supone rechazar los valores de la sociedad española, no tener relaciones con personas que no sean musulmanas, sacar a las niñas de la educación cuando empiezan a menstruar, concertar matrimonios... Todo ello son cosas rechazables.

Representantes diplomáticos en Estados Unidos aseguraron que hay indicios para concluir que el estado de Qatar estaría detrás de la campaña para arrebatar la Mezquita-Catedral de Córdoba a la Iglesia.

Lo desconozco. Sé que los musulmanes están pidiendo que se abra también a la práctica del islam pero es una petición que no tiene sentido desde el punto de vista histórico ni de la supuesta interpretación que se le pueda dar. Por otra parte, a cualquiera que pida eso habría que exigirle reciprocidad. ¿Qué legitimidad tiene Qatar u otro país del Golfo Pérsico para pedir la apertura de la mezquita al rezo islámico cuando está prohibida y perseguida la práctica de otra religión en esos países?

Zonas turísticas de Sevilla y otras ciudades españolas están blindándose con macetones de mil kilos para evitar atentados. ¿Es una medida más tranquilizadora para la sociedad que eficaz para, por ejemplo, atentados con cinturones bomba?

Son medidas que tienen sentido si contribuyen a tranquilizar a la ciudadanía porque sería un éxito para los terroristas que hubiera zonas de la ciudad desplobladas por miedo a un atentado.

Hay sevillanos que ya se plantean cambiar sus hábitos de vida a la hora de acudir a celebraciones públicas por miedo a los atentados.

Los terroristas llevan amenazándonos desde hace más de dos décadas, su nivel de agresividad es siempre el mismo, siempre están diciendo que hay sobradas razones para atacarnos pero la verdad es que tienen una muy limitada capacidad de hacerlo porque no hay tanta gente que esté dispuesta a atentar. La probabilidad de sufrir un atentado terrorista es difícil porque se está más expuesto a un accidente de tráfico o a otras cosas que no nos obsesionan ni modifican nuestro comportamiento. Lo cierto es que los yihadistas terminan matando a poca gente en relación con la cantidad de gente a la que terminan asustando.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación