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PATRIMONIO DE SEVILLA

¿Cómo será el color de la Giralda tras la restauración de las cuatro caras?

El arquitecto de la obra ha señalado que «se notará muchísimo» el cambio tras la limpieza a la que se está sometiendo

La Giralda de Sevilla, torre vigía de la ciudad

Color almagra y juntas en blanco en el arranque de un paño de sebka ABC

JAVIER MACÍAS

Durante seis meses, los expertos que han trabajado en la restauración de la cara oeste de la Giralda sacado a la luz elementos hasta ahora desconocidos como el cromatismo almagra que tenía la torre alminar en origen, la decoración vegetal de los paños de sebka . Sin embargo, esta laboriosa restauración ha tenido como objetivo fundamental la conservación de este símbolo de la ciudad, su consolidación, la protección y, también, la limpieza.

A lo largo de todo este tiempo, mediante tecnología láser , se ha ido zona por zona retirando las capas de suciedad que tenían los elementos, mediante la abrasión de esas zonas afectadas . Asimismo, se han respuesto ladrillos y piedras que faltaban , sustituyendo piezas procedentes de las canteras de los materiales originales, y se han retirado morteros que se incluyeron en restauraciones anteriores.

Al tratarse de una restauración conservativa, los expertos no se han planteado la recuperación de la policromía original roja que tenía la Giralda, debido a que su impacto sería de enormes consecuencias a todos los niveles. Sin embargo, esta limpieza ha deparado un nuevo cromatismo de la torre, mucho más blanca , al eliminarse toda esa pátina de suciedad con la que ha ido impregnándose a lo largo de los siglos. Para el arquitecto responsable de estos trabajos, Eduardo Martínez Moya , «tras la intervención en esta cara oeste se nota muchísimo , aunque con la cantidad de horas luz solar que tiene esta cara, se nota algo menos».

De esta manera, la Giralda, tras las cuatro fases de intervención -una por cada cara, y quedan la sur, la este y la norte, por este orden-, se presentará de un color mucho más blanco que el que mostraba hasta ahora. «No cabe ninguna duda de que a medida que se vaya avanzando, el impacto será más grande . Si se fijan en la cara oeste, tal y como ha quedado, verán que esa recuperación de las aristas de los paños de sebka, ha dejado a la Giralda de una forma absolutamente esplendorosa», ha apuntado el arquitecto.

Eduardo Martínez Moya ha apuntado también que se ha actuado primero en esta cara oeste por varias razones, «porque es la que da al interior del Patio de los Naranjos y nos iba a enseñar mucho» .

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