Para no perderse
A primera hora
La complicada salida de la Carretería desde su capilla, con el sol iluminando las túnicas azules y el canasto restaurado de las Tres Necesidades, es impresionante. Busque al Cristo expirante del Cachorro por su barrio a la ida, tanto por Castilla como por el Altozano y el Puente de Triana.
A media tarde
Vaya a ver a San Isidoro por la zona de Alcaicería y Lineros, donde la caída del Sol provoca una luz sobrecogedora sobre el Señor de las Tres Caídas y la Virgen de Loreto. Desde allí, vaya a la calle Almirantazgo y Postigo para ver pasar a la Soledad de San Buenaventura.
P or la noche
La O por las murallas del Alcázar y la calle San Gregorio es una estampa insólita. Ninguna hermandad de Triana discurre por esa allí. Para finalizar el día, no se pierda el paso de Montserrat por la zona de Castelar, Molviedro y Doña Guiomar. La entrada del cortejo fúnebre de la Mortaja, a oscuras, es imprescindible.
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