Gente

Gente

«Desde hace cinco años estamos separados»

Harto de especulaciones sobre su ruptura matrimonial, Espartaco dio ayer su versión sobre el tema

Día 29/09/2010 - 04.25h
KAKO RANGEL
Foto de archivo de la pareja, en Sevilla, durante el homenaje a Espartaco
Hasta la fecha, las únicas declaraciones que Juan Antonio Ruiz «Espartaco» habría realizado habían sido justamente para ABC y tras la publicación de unas fotos donde aparecía con Macarena Bazán y su madre paseando por el Algarve portugués. «Macarena es una buena amiga. Tomamos un café después de visitar a mi hermano y después me fui con mi madre a Sevilla». El torero estaba enfadado con la publicación por haber sacado a su madre, «una mujer discreta donde las haya que no tienen por qué mezclar», añadió. Ayer el diestro dio un paso más, envió un extenso y revelador comunicado a algunos medios para dar su versión de los hechos sobre su ruptura con Patricia Rato y poner atención en algunas de las informaciones que han aparecido y con las que está en total desacuerdo. Espartaco asegura que ésta será la única vez que hable de algo que considera pertenece a su intimidad, pero que no quiere callar por el juicio mediático que se le está haciendo y para que los medios, y su gente, sepan su versión de la historia.
De entrada aclara que están casados en régimen de separación de bienes y «por tanto no hay gananciales que liquidar». Es llamativo cuando al recordar la fecha de su boda, 8 de julio de 1991, comenta «espero que no tenga que entrar en detalles sobre aquel acontecimiento». Acto seguido confirma algo que se había dicho en su entorno. «El 4 de mayo de 2005, ante un ilustre Notario de Madrid, firmamos una Escritura de Acuerdo de Separación Conyugal de Hecho». A lo que añade: «no entiendo, por tanto, cómo a estas alturas una de las partes se puede presentar como victima de la otra, salvo que se pretenda manipular la realidad u organizar un juicio popular paralelo mediático con intenciones poco claras». También dice que en febrero de 2010 se firmó un documento cuya novedad eran unas «posibles donaciones» que le haría a su mujer. «Se me dijo entonces que la inclusión de “las alegadas donaciones” —que, insisto, no existían en el documento oficial sobre nuestra separación de cinco años atrás—, tenían como finalidad única la de tranquilizar a los padres de mi mujer sobre mis buenas intenciones. Nunca entendí que los padres de Patricia tuvieran dudas sobre mi comportamiento ya que mis relaciones con ellos fueron siempre más que buenas. De todas formas firmé el documento privado porque creí que la finalidad era la que se me habían dicho. De ninguna manera —también se me dijo—para hacerlo publico».
Naturalmente cuando a los pocos días supe que se había presentado unilateralmente en el Juzgado y alegando un consentimiento que nunca presté, me sentí engañado y traicionado y me negué a ratificarlo. A partir de aquel instante llegué a la conclusión, dolorosa entonces, de que nuestro fracaso matrimonial no tenía solución. Actitudes posteriores, en las que no quiero entrar ahora y espero no tener que hacerlo nunca, me lo han confirmado con creces». Sin citarlo, en esas donaciones está claro que el diestro se refiere al piso que tiene en Madrid, donde vive su hija Alejandra ahora que estudia en la capital y por el que mantiene un litigio a través de burofax con Patricia por el uso de ese inmueble. También deja claro que «jamás he regateado ni regatearé nada a mis hijos. Nada les ha faltado ni les faltará mientras yo pueda. Ni a ellos, ni a mi gente si llegara el caso. En mi casa no ha entrado más dinero que el que yo he aportado. Y quien diga lo contrario tendrá que demostrarlo y correr el riesgo de ver la realidad de los números» y recuerda que tanto su patrimonio como su fama se deben a su profesión como torero y a las muchas cogidas y operaciones que ha sufrido por ponerse delante de un toro. Expresa su deseo de que dejen de perseguirle los detectives y poder vivir en libertad a la vez que aclara que «oficialmente mi mujer y yo llevamos cinco años separados y, por si fuera poco, estoy sometido a una demanda de divorcio en un juzgado de Sevilla. Si salgo o dejo de salir con quien yo quiera creo que es mi derecho y a nadie tengo que rendirle cuentas. Salvo a mis hijas, que lo haré cuando pueda y crea conveniente».
Búsquedas relacionadas
  • Compartir
  • mas
  • Imprimir
publicidad
Consulta toda la programación de TV programacion de TV La Guía TV

Comentarios:

Sigue abcdesevilla en...

Copyright © ABC Periódico Electrónico S.L.U.