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El PSOE achica sus últimos actos y veta la fiesta en Ferraz

Zapatero pide el voto a los indignados: «No pueden regalar su abstención al PP»

Día 19/05/2011

GABRIEL SANZ

CÁCERES

El PSOE está achicando sus últimos actos electorales, lo cual, con un elevado número de votantes todavía indecisos, suena a contradicción con el mensaje de movilización y a dar la batalla por perdida. Ayer se conoció que los dos últimos mítines de la campaña, hoy y mañana, con José Luis Rodríguez Zapatero como protagonista, se van a desarrollar en recintos sensiblemente más pequeños que los inicialmente anunciados. Y, además, la irección federal anunció que «Ferraz no estará abierto a la militancia» el domingo para celebraciones. Nunca lo ha estado. La militancia se queda en la calle incluso en noches de elecciones generales.

Así las cosas, el mitin de hoy, en A Coruña, no tendrá lugar finalmente en el Palacio de los Deportes de Riazor, con un aforo de 5.000 personas, sino en el recinto de Expocoruña, en el que caben 2.500. Y el cierre de campaña, mañana, no será en la Plaza Mayor de Madrid. Bien es cierto que, en este último caso, las presiones de los hosteleros de la zona, temerosos de perder un día de negocio en sus terrazas, han influido. Y, sobre todo, el miedo de Ferraz a que los colectivos de «indignados» de Sol revienten un acto para el que el PSM había puesto toda la carne en el asador. Finalmente, la irección federal y la del partido en Madrid han acordado buscar acomodo en el recinto de IFEMA para ese último mitin.

Incluso anoche, en el acto de Extremadura, la región donde los sondeos pronostican de forma más clara que el candidato socialista, Guillermo Fernández Vara, va a ganar, los organizadores demostraron cierto miedo al «pinchazo». Cerraron con grandes telas 2.000 de las 6.100 localidades del Pabellón multiusos de Cáceres para un mitin en el que Vara y el ex presidente, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, fueron teloneros de Zapatero. Finalmente el pabellón se llenó con casi 5.000 personas.

Zapatero se dirigió desde Cáceres por vez primera a los «críticos», como los que se manifiestan estos días por las calles de Madrid y otras ciudades de España, para decirles: «Pido el voto a todos los progresistas porque no pueden regalar con su abstención una victoria de quien no se lo merece», el PP, que «quiere ganar sin hacer nada». «El voto es la expresión para ser crítico y exigente», recordó a los concentrados en la Puerta del Sol, que rechazan a los dos grandes partidos. Y el PSOE «es quien frena al PP». Zapatero dijo que su Gobierno ha invertido 4.105 millones de euros en siete años, cuatro veces más que Aznar y ahora el PP aprovecha la ola de la desesperación para recuperar poder. «Extremadura con el PSOE tiene un matrimonio, un vínculo muy profundo», que hará presidente a Vara.

Ibarra, con los indignados

Antes de esa intervención, Vara le había pedido que, si hay problemas para financiar Sanidad y Educación, recupere el mpuesto de patrimonio. A lo cual, el presidente del Gobierno echó balones fuera y recordó que ya ha propuesto al G-20 un nuevo impuesto internacional sobre transacciones financieras. En referencia a las primarias para suceder a Zapatero, dijo que él no se considera «ni más ni menos» que otros candidatos, pero quiere vivir en Extremadura. Antes, Juan Carlos Rodríguez Ibarra hizo referencia a los jóvenes «indignados» que se manifiestan estos días por toda España. Dijo que tienen razón y que los políticos del PP «no entienden nada». No son antisistema, señaló, son jóvenes «que no aguantan cuatro años» para que los políticos den respuesta a sus demandas. «Guillermo twitea con los jóvenes todos los días», insistió, que es lo que hay que hacer.

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