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El alumbrado de Madrid para estas navidades estará compuesto por 3,8 millones de lámparas, 600.000 menos que el pasado año, que además serán más eficientes, lo que permitirá reducir el consumo un 27,13% respecto al de 2010 manteniendo las mismas 230 horas de encendido.
Según ha informado hoy el Ayuntamiento, el encendido se producirá el 25 de noviembre -el último viernes de este mes, como es habitual- y se mantendrá hasta el 6 de enero. Cada jornada se encenderán las luces a las 18 horas y se apagarán casi todos los días a las 23 horas. Los viernes y sábados durará hasta la medianoche, el 24 de diciembre y el 5 de enero hasta las 3 y el 31 de diciembre hasta las 6 de la madrugada.
De acuerdo con las cifras aportadas hoy por el Ayuntamiento, el consumo será de 285.412 kilovatios hora y la potencia instalada se reducirá un 36,21 respecto a las navidades anteriores hasta los 675 kilovatios. Estas navidades, el 84,3% del alumbrado navideño estará fabricado con tecnología led, frente al 74% del año anterior, y el resto con lámparas de bajo consumo.
La suma de todos esos factores producirá un "ahorro ambiental" que el Ayuntamiento considera "muy importante", ya que se dejarán de emitir más de 35 toneladas de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera.
El ahorro será también económico, puesto que el presupuesto de fabricación, instalación, mantenimiento y desmontaje será de 2,5 millones de euros -como aprobó la Junta de Gobierno en pleno verano, el pasado 28 de julio-, un 15% menos que en las navidades pasadas, en las que el coste ya se había reducido un 33% respecto al año anterior.
Un alumbrado «reciclado» de otros años
En cuanto al diseño, el Ayuntamiento reconoce que el alumbrado de este año es un "no presenta novedades" sino que utiliza los de años anteriores, obra de algunos de los principales modistos, arquitectos y diseñadores gráficos españoles.
Entre los primeros figuran Ángel Schlesser, que decorará la calle Princesa, Hanníbal Laguna la de Ortega y Gasset, Purificación García la de Goya, Juanjo Oliva la de Jorge Juan, Ana Locking las de Fuencarral y Montera, Ágatha Ruiz de la Prada la Puerta del Sol, Juan Duyos la calle de Bravo Murillo, Amaya Arzuaga la de General Ricardos y Sergio Sebastián el barrio de Chueca.
Los arquitectos Teresa Sapey y Ben Busche son los autores de la iluminación de Serrano y Hortaleza y de Gran Vía, Mayor, Ballesta y Barrio de las Letras, respectivamente, y el diseñador Roberto Turégano de la de Velázquez.
El objetivo de esta iluminación sigue siendo, según el Ayuntamiento, que este año ha informado a través de una nota y no en rueda de prensa, "apoyar e incentivar la actividad comercial y fomentar el turismo con el fin de estimular el consumo, generar empleo y promover el dinamismo en una coyuntura de crisis económica".
El Gobierno municipal entiende que Madrid se convierte en Navidad en un gran "escaparate" y que el alumbrado navideño es "uno de los polos de atracción más sugerentes para los millones de visitantes que recibe la ciudad en esas fiestas".
Según cifras del Barómetro municipal de Consumo, el alumbrado navideño es conocido por un 99,5% de los madrileños, de los que un 75,3% aseguran disfrutarlo.
