Más de 6.000 millones de euros en «bonos patrióticos»
«Comprar duros y venderlos a cuatro pesetas no es un buen negocio», avisó la pasada primavera el presidente de CaixaBank, Isidro Fainé, a sus colegas banqueros, enzarzados en la guerra de «superdepósitos». La advertencia bien valdría para las comunidades autónomas, que ante la caída de los ingresos y el cierre de los mercados han optado también por acudir al ahorro de los particulares para financiarse. Lo hacen emitiendo sus «bonos patrióticos», deuda pública autonómica que funciona de forma casi idéntica a la del Estado. La Generalitat de Cataluña, uno de los gobiernos autonómicos más activos en este sentido, anunció el pasado mes de octubre una emisión de entre 3.700 y 4.000 millones de euros en títulos a uno y dos años y que ofrecen un rendimiento de entre el 4,75% y el 5,25% anual.
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