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Cerca de 400.000 personas disfrutarán del «mapping»

Este espectáculo ha sido diseñado y producido por la empresa GPD y en él han participado creadores sevillanos

P.

G.

SEVILLA

Una de las novedades más exitosas de la apuesta por convertir a Sevilla en una ciudad referente en Navidad es la proyección del videomapping 3D en la fachada del Ayuntamiento, que se ha convertido en un reclamo que nadie quiere perderse. Se estima que desde el 15 de diciembre cuando comenzó a proyectarse hasta mañana, 5 de enero, cerca de 400.000 personas disfrutarán de esta actividad, según fuentes municipales. 1

Y es que, si una imagen vale más que mil palabras, con el complemento de la música, y de los sonidos en general, puede llegar a configurarse en todo un espectáculo, como el que estos días puede contemplarse en la Plaza de San Francisco y que ha sido diseñado y producido por la empresa GPD. Su director de eventos, Javier Sánchez, ha sido la persona encargada de coordinar la labor de conjunto que ha precisado la elaboración de este singular proyecto. La parte creativa relacionada con la imagen ha corrido a cargo de Miguel Moreno, mientras que el diseño sonoro del «mapping» ha dependido del compositor Francisco José Cuadrado, todos ellos, según apunta este último, creadores sevillanos que han sabido compenetrarse «a la perfección» en este trabajo en común.

Lograr el impacto deseado

Cuadrado asegura que asumió el encargo como un auténtico reto ante la dificultad que planteaba «crear, en un tiempo casi récord, efectos de sonido de cosas que no existen para potenciar la imagen».

Han sido muchas horas de trabajo, de seleccionar entre un centenar de piezas las músicas más adecuadas en relación con la estética y el ritmo de la imagen, aparte de la realización de los efectos sonoros que se requerían y para los que se ha recurrido a casi trescientos diferentes para conseguir el resultado final. Cuadrado, que lleva más de doce años dedicado a la composición de música para televisión, cine, teatro y museos, comenta lo curioso que ha sido para él aportar sonoridad a las secuencias referidas a la nevada de 1954 en Sevilla «que, por edad (tengo 36 años), no conocí y, sobre todo, lo complejo que ha sido dar sonoridad a la transformación del ayuntamiento en una bola de cristal con nieve, algo de lo que no existe una referencia en la realidad». De hecho, para crear ese efecto se han empleado una veintena de sonidos «que suenan a la vez y, entre ellos, el de un timbal reproducido al revés».

Satisfacción

Francisco José Cuadrado resalta, a su vez, el trabajo previo de grabación que ha precisado la conversión de la casa consistorial en una fachada gélida y su posterior derrumbe, un efecto sonoro que consiguió haciendo crujir numerosos cubitos de hielo. Más fácil le resultó, en cambio, poner voz a los ángeles que aparecen en la secuencia de los cuadros, para lo que tomó «prestadas» las risas de sus hijos...

«Con el sonido podemos llegar a la parte más visceral del espectador —explica Cuadrado—. El hecho de que la Plaza de San Francisco esté llena todos los días es algo que me impresiona y que, a título personal, me hace sentir satisfecho del trabajo creativo que se ha llevado a cabo».

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