ernesto vázquez, presidente del foro cardenal niño de guevara

«La seguridad de la Carrera Oficial es preocupante»

El Foro cumple seis años en los que ha publicado más de 60 artículos con la pretensión de llamar la atención de las cofradías en cuestiones como la formación, el apostolado y la evangelización

«La seguridad de la Carrera Oficial es preocupante» ROCÍO RUZ

aurora flórez

10/03/2012
Actualizado a las 08:14h.

—¿Cuál es el balance de los seis años que cumple el Foro Cardenal Niño de Guevara?

—Podemos estimarlo como positivo, ya que durante estos seis años hemos publicado más de sesenta artículos en los que hemos incidido en los distintos aspectos que a nuestro juicio no están lo suficientemente tratados por las hermandades, como son la formación, el apostolado, la evangelización, el fomento de una vida cristiana más perfecta. Todas estas actuaciones tienen el denominador común de pretender prestar un servicio a nuestra Iglesia Diocesana y, en particular, a las hermandades de Sevilla. Del mismo modo hemos recibido a personalidades destacadas relacionadas con las Hermandades, Consejo de Cofradías e Iglesia Diocesana —arzobispo y obispo auxiliar—, de cuyo cambio de impresiones hemos aprendido y nos ha hecho seguir avanzando.

—¿Por qué es necesario el Foro en la Sevilla del siglo XXI?

—Parece lógico pensar que en nuestra centuria, en la que el cristiano ha de ser cada día un creyente más y más comprometido, crear una asociación que analice en profundidad y con el rigor necesario la temática y razón de ser de nuestras hermandades con arreglo a sus fines fundacionales y el papel que representan dentro de la propia Iglesia Diocesana, opinamos que no solamente es necesario, sino imprescindible.

—¿En estos años ha visto algún cambio en el talante y comportamiento de las hermandades?

—Evidentemente el mundo de las hermandades ha ido a mejor, en base a las directrices conciliares y a las emanadas de nuestros pastores. Hemos notado un incremento en la labor de formación a todos los niveles y en especial de la juventud. Es muy positivo valorar el esfuerzo, que en su mayoría hacen las hermandades para atender tantas y tantas necesidades sociales como se vienen produciendo.

—¿Cree que la labor social, formativa y evangelizadora de las hermandades está suficientemente valorada o se pierde en la leyenda de que son simples reuniones de capillitas que sacan pasos?

—El conocimiento que tiene la sociedad de la labor de las hermandades llega en gran medida a través de los medios de comunicación que se dedican a dar cumplida información sobre aspectos poco o nada relevantes de la vida y del día a día de nuestras corporaciones, en tanto que la labor formativa y evangelizadora de las hermandades pasa casi desapercibida. No obstante es de reconocer el papel determinante de algunas hermandades como complemento a la falta de formación de la que padece nuestra juventud en general. En cuanto a la labor social, como ya hemos dicho antes, es determinante en la actualidad, aunque todas estas labores son «manifiestamente mejorables».

—¿Piensa que realmente la opinión y el análisis del Foro tienen peso e influyen en el ámbito cofradiero?

—Nos agradaría que las aportaciones que con tanto esmero y cariño formula el Foro llegasen cada vez a más ámbitos relacionados con el mundo de las Hermandades y que, por ende, fuera reconocido y valorado el bagaje espiritual y formativo que sus textos contienen. Pero suponemos que todo ello es cuestión de tiempo, paciencia y reflexión. No obstante con la mentalidad y el sentido de independencia de nuestras hermandades es difícil que se reconozca nuestra labor, aunque lo cierto es que muchas actitudes actuales parecen coincidir con el parecer del Foro en sus comparecencias.

—¿Qué proyectos tiene el Foro para este año 2012?

—Quisiéramos abrir nuevos horizontes en nuestra comunicación con las hermandades. Es esta una tarea en la que estamos comprometidos muy seriamente, al igual que en la ampliación de los contenidos a plantear. Al hilo de lo anteriormente expuesto, en las nuevas líneas que pretende abrir el Foro, la Carrera Oficial representa un capítulo ciertamente importante. Las razones de este análisis que pretendemos sea objetivo, riguroso y exhaustivo, es la percepción del peligro y gravísimas repercusiones que cualquier incidente podría derivarse para la vida de las cofradías, para la opinión pública ciudadana, las autoridades municipales y la imagen exterior, y por demás, el daño irreversible que causaría a la propia Iglesia Diocesana.

—La línea del Foro ha sido hasta el momento de índole más espiritual que material ¿cómo se mete ahora en cuestiones como el diseño de la carrera oficial?

—Y debe seguir siéndolo como razón de ser y de vida cristiana, pero ello no obsta a que por lo expuesto anteriormente y porque consideramos este tema de la seguridad de la Carrera Oficial como algo sumamente preocupante en aras de asegurar, que si por desgracia se produjese algún tipo de contingencia, ésta sería por lo fortuito de las circunstancias, pero nunca por la imprevisión de sus organizadores. Y que una vez producida, se cuenta con los medios y previsiones necesarios para paliar sus efectos en la mayor medida posible.

—Sea como nazareno o espectador ¿que busca en la Semana de Pasión?

—Como nazarenos y como sevillanos, querríamos no ser simples espectadores en esta hermosa manera de conmemorar la pasión de Cristo, nuestro Redentor. ¡Ya hubo bastantes espectadores hace dos mil años en Jerusalén! Nos gustaría participar en el Drama y entrar conscientemente en la alegría de la Pascua de Resurrección.

—¿Cómo le gustaría que fuera la Semana Santa?

—Como quiere la Iglesia: una ocasión especial para volver nuestros corazones a Dios. ¡Ojalá sea tiempo de conversión para la mayoría de los que nos declaramos seguidores del Nazareno! Personalmente creemos que esto es compatible totalmente con la forma que nuestros mayores nos legaron y que hace que Dios y su Madre Santísima fortalezcan nuestra fe por las calles de Sevilla.