agua-embotellada
Compra de agua embotellada en un supermercado / José María Alcaide
Campaña #SanaySegura

Coronavirus y el agua como derecho

«El agua del grifo es sana y segura y no hay justificación sanitaria para elegir aguas embotelladas»

13 abril 2020, 12:37

El sector agroalimentario, considerado actividad esencial, no ha parado en esta crisis. Gracias a eso, los españoles hemos llenado nuestras casas de legumbres, arroz, pasta y, también, agua mineral. Según la mayoría de los diarios, el agua embotellada es el segundo producto más comprado en los supermercados.

En Italia pasaron por una situación parecida que obligó a El Instituto Superior de Salud a intervenir. En una nota publicada enfatizó que no es necesario almacenar botellas voluminosas, porque el coronavirus y la infección COVID-19, no puede de ninguna manera transmitirse a través del agua del grifo.

Desde los operadores públicos del agua afirmamos que el agua del grifo es sana y segura y que no hay justificación sanitaria para elegir aguas embotelladas. Nuestras prácticas actuales de purificación son 100% efectivas para eliminar cualquier tipo de virus o bacteria perjudicial para la salud humana.

Agua potable y de calidad

En la actualidad no hay evidencia de transmisión, ni del actual coronavirus, ni de ningún otro virus, ni siquiera al personal profesional expuesto a las aguas residuales de manera cotidiana. Se están tomando medidas preventivas en numerosos sectores para evitar contagios y nosotros, operadores públicos de agua, seguimos garantizando a 100% un suministro de agua potable de calidad.

La mayoría de los operadores públicos han limitado la presencia física en sus oficinas y están impulsando al máximo el teletrabajo en sus plantillas de trabajadores. No obstante, las infraestructuras clave en el ciclo integral del agua (plantas de potabilización y depuración) mantendrán, o incluso reforzarán, los turnos presenciales de trabajadores para garantizar el servicio de suministro en todos los hogares.

La emergencia sanitaria del coronavirus está afectando a prácticamente todos los ámbitos de la vida cotidiana. Esta crisis no puede dar al traste con los postulados colectivos de nuestras empresas públicas de agua: la solidaridad, la cohesión y la cooperación. La mayoría de las empresas públicas han decidido suspender, con carácter inmediato, cualquier procedimiento de corte del suministro a sus usuarios.

La medida tiene como principal finalidad garantizar el abastecimiento de agua a todos los hogares durante las próximas semanas, en consonancia con las recomendaciones del Gobierno de la nación para frenar la expansión del coronavirus. Además, los operadores públicos de ciudades como Valladolid (Aquavall) o Sevilla (Emasesa) han asignado fondos para paliar las dificultades económicas de familias, autónomos y pymes.

Nueva campaña

El pedagogo Paulo Freire sostiene que «la educación verdadera es praxis, reflexión y acción del hombre sobre el mundo para transformarlo». La pedagogía, en una sociedad democrática como la nuestra, será el principal motor de cooperación de las personas frente a esta crisis.

En este sentido, desde los operadores públicos, hemos puesto en marcha, con el apoyo de muchos colectivos sociales, la campaña #SanaySegura para que nadie ignore que el agua de grifo es sanitariamente perfecta y para que evitemos todo lo posible salir de casa para comprar productos que no son necesarios.

Dudamos que haya un antes y un después tras esta crisis de salud mundial si no se hace un análisis crítico de las políticas individualistas que han despiezado una de las principales estructuras de integración de los individuos en nuestros estados: los servicios públicos. El Covid-19 puede ser el último aviso antes del colapso como especie y la apuesta por el agua como un derecho y no como una mercancía es una de sus vacunas.

Ámbitos