Girona - Betis
Borja no quiere depender de nadie (1-2)
El delantero bético sella con dos goles la remontada ante el Girona y el pase a la Liga Europa en un duelo de muchas oportunidades

Borja Iglesias apagó los transistores, borró la aplicación de Twitter en el móvil e hizo caso omiso al videomarcador. Dos goles suyos hicieron que el Betis no tuviera que depender de otros resultados ni de índices de probabilidades. No le importaba eso al ... gallego, sino ganar. Y llevó al Betis a ese triunfo habitual en Girona que confirma lo también ya cotidiano de clasificarse para la Liga Europa. Tres campañas consecutivas ahí. Sexto puesto garantizado . El Betis que quería estar en la zona alta no es una casualidad, está lejos del milagro. Mucho trabajo hay ahí. Si Borja marca quince goles esta campaña y la pasada casi llegó a 20, si Miranda la pone de lujo, si Canales da una asistencia tremenda, si Edgar es un valladar atrás, si Bravo justifica con paradones su renovación... Hay mucha tarea para reducir a anécdota lo que el Betis está consiguiendo hogaño. Le faltaba a los verdiblancos remate, gol, llegada, pero ahí estaba Borja para darle la vuelta a todo en una segunda parte tremenda del gallego, el estilete del Betis europeo.
La presentación del partido evidenció que las propuestas eran espejos. Sólo un balón para tantas ganas de posesión. El Girona lo acunó durante los dos primeros minutos. Luego aceptó ser repartido cuando se dio cuenta de que el Betis lo trataba hasta mejor. Los verdiblancos fueron conquistando metro a metro hasta convertir el duelo en un ataque constante, al menos hasta la línea de tres cuartos donde las ideas más caras no acaban de concretarse. Canales dispara pero es taponado. Poco después llega una clarísima con un tiro con la izquierda de William Carvalho al que Edgar , habilitado tras el córner, no llega porque la pelota le bota antes. Sólo tenía que empujarla. Vive el Betis asomado al balcón del área local, proponiendo hacer daño.
Ayoze, Canales, William, Borja, Rodri . Todos generan asociaciones que son una maraña para la defensa del Girona, que sobrevive lanzando balones en largo para ver si Valery o Castellanos pillan algo ahí lejos. Entre tanta distracción el propio Valery se confunde y un pase atrás suyo lo toma Ayoze, el más listo de la clase, para plantarse solo ante Gazzaniga, por el centro y perfilado a su pierna derecha. Un regalo. Es como un penalti pero en movimiento. Su disparo va a la derecha del portero, que ya había adivinado la intención y volaba para despejar la pelota. Más clara, díficil.
Son buenos minutos los del Betis, que lo intenta de todas la maneras posibles menos colgando balones. Mucha presencia en el área, llegadas, pases atrás, disparos desde fuera, regates. Amenaza constante. Hasta Míchel , que no lo ve claro, pone a calentar a sus suplentes. Canales la pone cerrada y Borja le da de espuela para que salga por poco alto, aunque estaba en fuera de juego. Rodri disfruta de su libertad y se da la mano con Canales en el cambio de posición constante, lo que despista a las marcas. Es el extremeño el que dispara alto tras buenos recortes.
Y justo cuando el Betis se relamía con tantas oportunidades, justo cuando vivía lo que parecía una cuenta atrás para el 0-1 llegó el 1-0. Una desaplicación atrás con Luiz Felipe fuera de zona para tapar el hueco dejado por Sabaly y con Guido y Carvalho también lejos de las coberturas la aprovecha Miguel, quien se mete por dentro y dispara raso. Bravo puede hacer mucho más dado que el balón entra por debajo de su cuerpo. Es una anécdota que el Girona pise el área bética pero letal porque es la firma del 1-0, minuto 36. A partir de ahí ocurre poco relevante hasta el descanso, donde Pellegrini se mesa los cabellos y le pide a los suyos más concreción en la segunda mitad.
Y vaya cómo fue la respuesta. Obedecen a su técnico los jugadores. Enorme pase de Miranda a la carrera de Canales por la izquierda, levanta la cabeza el cántabro y ve a Borja Iglesias en su sitio, en la zona del nueve , allí donde recibe el balón y la pone cambiándole de palo al vuelo de Gazzaniga. El empate rehace el partido. El Girona busca la pelota para tener algo más que decir. Las ocasiones no van a responder a ello, sino que se irán distribuyendo en un ida y vuelta que le beneficiará al Betis.
De hecho, Miranda dispara cruzado aunque con algo de temor y Edgar protagoniza una subida de esas de central inteligente con asociación con Rodri que no es gol porque Gazzaniga tapa bien abajo. Borja casi canta el segundo con un cabezazo tras centro de Canales que acaba en el larguero . Responde el Girona obligando a un paradón de Bravo tras llegada de David López casi a lo Edgar. Es el central bético lo más destacado en la zona de atrás hasta que Bravo vuelve a intervenir. Castellanos le pone a prueba con un cabezazo cruzado. El duelo parecía que iba a relajarse pero un descuido siempre iba a ser caro con tanta calidad sobre el césped.
Porque Borja tenía más cosas que decir para llevar al Betis a la Liga Europa sin depender de nadie más. Una larga jugada de toque en la frontal acaba en una apertura sensacional a Miranda, quien la pone rasa abajo mientras Borja le enseña la sombra por un lado a Bernardo para ir por detrás y sententenciar el duelo con el 1-2.
A partir de ahí la ovación a Joaquín, un paradón de Bravo a Castellanos con Edgar rebañando oportunamente. Y la fiesta de los béticos en la grada de Montilivi un año más, porque siempre es una visita fructífera el campo del Girona para los verdiblancos. Los cambios no modifican casi nada. Sólo que Joaquín tiene el 1-3 en un contragolpe y busca picarla pero le sale mal y no hace más que pedir perdón. Bravo lo arregla luego a los pies de un rival y el triple pitido de Díaz de Mera acaba con el partido. La foto es la del triunfo de un Betis que asegura la Liga Europa de forma matemática sin tener que depender de nadie.
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