La trascendencia de Rubén Castro, sin precedentes en la historia bética
Supera a Quino (68-69), Rincón (82-83) y Mel (89-90) en porcentaje de goles y diferencia con respecto al segundo anotador del equipo
Rubén Castro ha anotado el 58 por ciento de los goles del Real Betis en la presente campaña liguera. La importancia del canario es sideral en la capacidad anotadora del conjunto verdiblanco. Con 17 goles de 29 totales, distancia en quince a los siguientes compañeros afortunados en esta parcela: Pezzella y Vargas, con dos tantos cada uno. El resto fueron, uno por cabeza, de Petros, Cejudo, Joaquín, Jorge Molina, Ndiaye, Musonda, Rennella y Westermann . No hay color, pues, para definir a Rubén Castro como el ariete decisivo en el Betis. Y esta circunstancia, esta trascendencia excesiva de un jugador heliopolitano en la faceta anotadora sólo ha tenido dos precedentes en la historia bética en Primera y Segunda división en su más que centenaria historia. Obvio que han pasado jugadores de leyenda a la hora de marcar goles como Ansola, Alfonso, Morán, Cabezas u Oliveira , pero sólo Quino (en la 68-69), Rincón (en la 82-83) y Mel (en la 89-90), el primero y el tercero en la segunda categoría, tuvieron una relevancia parecida en el protagonismo del gol bético.
En la 68-69, Quino anotó nada más y nada menos que 32 de los 69 goles verdiblancos en una campaña en la que los heliopolitanos acabaron séptimos. Casi la mitad de los tantos y distanciando de manera importante a sus los compañeros que más cooperaron en esta parcela, como Rogelio y Santi, con siete dianas cada uno. Ya en la 82-83, Hipólito Rincón se alzó con el único Pichichi de la historia del Betis en la máxima categoría con 20 goles de los 42 totales de un equipo que finalizó undécimo y a cuya tarea realizadora también contribuyeron Cardeñosa (ocho) y Ramón (tres). Mientras, en la campaña 89-90, que finalizó con ascenso a Primera, Pepe Mel hizo 22 de los 44 goles béticos, sólo seguido por Chano, con seis tantos. Fueron los goleadores béticos con mayor porcentaje con respecto al total y con claras diferencias con los demás compañeros en esta tarea. Pero a estos tres, incluso, les supera Rubén Castro y en Primera.
Otros jugadores con una especial trascendencia en su vena goleadora en una temporada del Betis han sido Aquino , también en Segunda en la 93-94, con 26 goles de 66, que dieron el ascenso a los heliopolitanos y sólo seguido por los seis de Cuéllar; Hugo Cabezas, con 17 tantos por cinco de Megido y Gordillo en la 78-79, también de ascenso con 58 en total; los catorce de Ansola (64-65) y Morán (79-80)… En otro escalón están Alfonso y Ricardo Oliveira, que hicieron muchos goles en el Betis pero estuvieron bien secundados por otros compañeros, puesto que el madrileño hizo 25 goles de 81 totales en la 96-97 con protagonismo también para Finidi (diez) y Pier (nueve), entre otros, mientras que el brasileño no fue el único con acierto de la campaña 2004-05, puesto que aunque hizo 22 de los 65 tantos verdiblancos también tuvieron acierto sus compatriotas Edu (once) y Assunçao (ocho).
En los seis partidos que restan Rubén Castro tiene varios retos ante sí:superar su plusmarca de 18 goles en una temporada en Primera, decidir un derbi (algo que considera una cuenta pendiente) y acrecentar su trascendencia en una temporada en la que de manera unánime ha sido considerado el gran artífice de la permanencia holgada del Betis en la máxima categoría.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete