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Entrevista

Mizzian: «¿Mi gol en El Arcángel? El éxito sería subir a Segunda división»

El fútbol y el Betis Deportivo le han regalado grandes momentos esta temporada al delantero melillense, confiado en que el filial bético peleará por el ascenso en la final del domingo ante el Algeciras

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Raúl: «Marcar un gol con la camiseta del Betis es algo que no se puede explicar»

Mohamed Mizzian, a las puertas del estadio Benito Villamarín Real Betis / Kappa
Ignacio Liaño Bernal

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El que dijo que el delantero vive del gol jamás fue delantero. Respira por los minutos. Sobrevive gracias a las ocasiones, a las oportunidades. Las que crea con y sin balón. También resiste por las que yerra. Y se emociona por sus ilusiones. Las que pide el duende original de Mohamed Mizzian (Melilla, 2000), que vive una evaluación continua cada fin de semana en el mejor Betis Deportivo de la historia. Porque si Raúl es la Giralda de este equipo con doce goles que dan sombra, Mizzian apoquina el oro de esa torre almohade que baña sus caderas en el río de sus tres aciertos. No se entiende la una sin la otra en Sevilla. Ni el uno sin el otro en el Betis Deportivo. Los dos son monumentos imprescindibles en el filial verdiblanco, que vive el momento más importante de la temporada en su lucha por ser de plata. Más que aquella mañana en la que Mizzian silenció, con un sólo gol, El Arcángel y el Jesús Navas a la vez.

¿Cómo va esa semana de entrenamientos antes de medirse al Algeciras el domingo (18.00 / Betis TV)?

El equipo está en una buena dinámica. Estamos juntos y vamos remando en el mismo barco, tenemos muchas ganas de jugar contra el Algeciras y lo vamos a afrontar como una final. Ese partido se gana sí o sí.

Imagino que habrá pensado en esa última oportunidad que se le presentó frente al San Fernando en la última derrota. ¿Cómo convive con el error de cara a portería siendo tan joven?

Unos días se gana y otros se pierde. Unos días las metes y otros no. La verdad es que tuve una clara, la fallé, pero no pasa nada. De los errores se aprende. Por lo menos las tenemos. El problema sería que no hubiera ocasiones. Convivo bien con el éxito y el error. Se sigue trabajando para mejorar y punto.

Convivir con el éxito imagino que será muy diferente. Usted lo sabe bien, después de haber marcado el gol de todos los béticos que aman la cantera para conseguir plaza en Primera RFEF. Y qué gol.

El éxito es de todo el equipo. Al final se lo lleva el que marca el gol, pero eso para mí no es nada, la verdad. El éxito real estaría en subir a Segunda división. Los goles que marque son individuales. De vez en cuando está bien, pero estoy motivado por subir a Segunda división.

Imagino que aquel gol, que dejaba fuera a vuestro eterno rival para dejar paso al Betis Deportivo, tendría una dedicatoria muy especial…

Sí, la verdad es que sí. Eliminamos a nuestro máximo rival para que nosotros pudiéramos jugar este play off . Marque yo o Raúl, vamos todos juntos. Todos somos uno.

Qué caprichoso es el fútbol, por cierto. Todo el año leyendo titulares de Raúl y coge usted y marca el gol decisivo. ¿Cómo de sana es su competencia con él?

Con Raúl me llevo muy bien, la verdad. Él ha tenido su buen año, me alegro muchísimo por él. Yo tendré mi año también, yo tendré mi momento, seguro. Somos dos buenos delanteros. No pasa nada porque uno juegue y el otro no. Somos iguales. Decisivos también fueron sus goles a lo largo de la liga. Son más válidos los suyos que los míos, ¿sabe? Me llevo muy bien y podemos jugar los dos juntos, está demostrado.

Abrazo de gol entre Raúl y Mizzian Real Betis

Por eso quería preguntarle. Frente al Sanluqueño, Manel Ruano pareció haber encontrado una fórmula interesante donde se complementa mucho con su juego. ¿Cree que jugar con dos puntas aprovecha al máximo vuestras cualidades o prefiere sentirse más libre como única referencia?

La verdad es que contra el Sanluqueño la liamos Raúl y yo. No pasa nada, si tengo que salir del banquillo, aportaré. Nos complementamos muy bien y estuvimos a punto de liarla contra el San Fernando. Yo le di una que él falló y yo tuve otra que me dio él y fallé. Si la llegamos a meter, la hubiésemos liado otra vez. Estamos enfocados ya en meterle goles al Algeciras.

¿Qué consejos le da Manel Ruano, que siempre apela a que el fútbol es espectáculo, y el espectáculo es gol?

Tiene una filosofía que intenta inculcarnos. Las formaciones, el 4-1-4-1, el 3-5-2, el 4-4-2... y hay unas cuantas más. La verdad es que es un buen entrenador. ¿Qué le voy a decir? Si ya lo ha demostrado, ¿sabe? El ascenso a Segunda B, y luego a Primera RFEF. Eso es gracias a todos. Todos hemos puesto nuestro granito de arena.

«La que hemos liado, amigo…» le escribía usted a Raúl cuando se repartieron asistencias y goles frente al Sanluqueño. Ahora comienza la segunda parte de esta segunda fase. ¿Quedan por ver aún los mejores goles de Mizzian y Raúl en este final de temporada?

Esperemos que sí. La verdad es que la liamos contra el Sanluqueño. Podemos hacer goles y dar asistencias fácilmente. Espero marcar más goles, significaría que vamos por buen camino. Y Raúl igual. Esperamos darle felicidad al beticismo en los tres últimos partidos en los que nos jugamos la vida.

«Esperamos darle felicidad al beticismo en los tres últimos partidos en los que nos jugamos la vida»

¿Y si lo que quedan no sólo son los tres últimos partidos? ¿Ve capaz al equipo de meterse en el play off de ascenso a Segunda?

Tenemos un equipazo. Si hemos conseguido muchos ascensos en un año... creo que el equipo se va a meter sí o sí.

Alternó su etapa de juvenil en el Melilla. Allí incluso jugó dieciseisavos de Copa del Rey contra el Real Madrid. ¿Impone el Santiago Bernabéu?

Tenía 18 años. Claro que impone. No había jugado nunca en un estadio de Segunda ni de Primera. Pero luego dejé que fluyera e hice un buen partido. Todo trabajo tiene su recompensa.

¿Cómo llegó ese niño de Melilla a sorprender a uno de los mejores equipos de la historia de este deporte? ¿Quién le contactó tras aquel partido?

Empecé marcando muchos goles con el juvenil, y se escuchaba el rumor de que me quería el Barcelona y el Real Madrid. Y seguí jugando porque no me lo creía. Hasta que vi a varios entrenadores que vinieron a hablar conmigo y vi que era verdad. «¡Uf», me dije. «¡La estoy liando!». Y ya luego jugué Copa contra el Madrid y jugué bien... y de ahí firmé con el Real Madrid.

Marcos Llorente trata de robarle el balón a Mizzian cuando pertenecía al Melilla UD Melilla

¿Con quién coincidió allí? ¿Qué pudo aprender?

Cuando llegué a Madrid coincidí con un grupo espectacular. Y pude entrenar con el primer equipo. Coincidí con Benzema, Bale, Marcelo, a los que yo veía y decía: «¡Madre mía, con quién estoy aquí!». Fue una experiencia inolvidable, la verdad. De Melilla a Valdebebas, que es gigante. Yo me perdía por los campos, había doce. Llegué tarde a un entrenamiento y todo (ríe).

Mizzian, en casa

Según me consta, es muy arraigado a su tierra, Melilla. ¿En qué piensa ahora, en esta situación de pandemia, cuando se acuerda de su hogar, de su casa?

Echo de menos ir a mi tierra. A mi casa de Marruecos, también. Pero todos estamos afectados por igual. Echo de menos a mi familia y amigos. De todo se levanta uno, aunque estemos en pandemia.

Se ha mostrado muy orgulloso públicamente de su religión, la musulmana, en numerosas ocasiones. Sé que puede parecer una pregunta algo personal, pero supongo que es una parte importante de su vida, ¿no?

La verdad es que mi religión para mí lo es todo. Es lo que me han inculcado desde pequeño. Cada uno tiene su religión, se respeta y punto. Media parte de mi vida es de mi religión y estoy muy contento.

¿Reza en casa?

Sí, como todo musulmán. Tenemos cinco horas de rezo al día.

¿Cómo le afecta a un jugador de fútbol de élite, por nutrición y descanso, esas modificaciones que exige su religión en su vida diaria?

Me afecta porque no bebo agua ni como desde las 5.30 de la mañana hasta las 21.00 que se va el sol. Es complicado, pero es un sacrificio que tengo que hacer por mi religión, aunque mi religión me permite posponerlo cuando tengo partidos importantes para no poner en riesgo mi salud. Y luego se recupera cuando pasa el ramadán. Tengo que hacer una obra de caridad a las personas más necesitadas cuando no ayuno en ramadán.

El Betis llega a su vida en julio de 2019, donde firma por tres años. Me dicen que se identifica mucho con el club por su forma de ser. ¿Qué es el Betis para usted?

El Betis lo es todo. Por la directiva, el personal... aquí me siento como en casa. Es un club humilde y trabajador, como soy yo. Estoy muy contento de estar aquí y espero que sean muchos años y hagamos grandes cosas juntos.

¿Pasan sus planes de futuro por el Betis, aunque aún le quede un año de contrato en Heliópolis?

Mi plan es quedarme muchos años en el Betis. Tengo que seguir trabajando para que me den la oportunidad de demostrar el potencial que tengo y me encantaría quedarme aquí durante muchos años, pero eso no depende de mí. De mí depende el trabajo que haga.

Ruano felicita a Mizzian en El Arcángel tras marcar el gol del triunfo Real Betis

También me han dicho que le gusta mucho la animación. ¿Se siente un hincha más cuando ve jugar al Betis?

Veo todos los partidos del Betis cuando puedo. Y sí, soy un hincha más. No era de ningún equipo en particular, pero ahora soy del Betis. Me encanta cómo luchan, como se dejan el alma hasta el último minuto. Me considero uno más de ellos. El Betis es muy grande.

«No era de ningún equipo en particular, pero ahora soy del Betis»

- ¿Ha tenido ocasión de poder conocer a Manuel Pellegrini personalmente? ¿Qué le parece como entrenador?

El primer año ya empecé a entrenar con el primer equipo y estuve a punto de ser convocado para ir a un partido contra el Mallorca. Con Pellegrini sólo he podido coincidir en partidillos de primer equipo y filial. Pero tengo que trabajar para que me den esa oportunidad. Lo que veo es que transmite mucho al equipo. Le gusta la gente que trabaja, que aprieta, que va.

Llegarán al domingo con ganas de poder sumar un nuevo triunfo. Por la última derrota, y sobre todo, por cómo se dio el partido de ida contra el Algeciras…

El Algeciras se va a encontrar a un Betis Deportivo que va a estar como un avión. Nosotros no vamos a ir a pasar el rato, vamos a ir a ganar, y si podemos, a arrasar. Lo digo siempre desde la humildad y el respeto a los rivales, pero nuestra mentalidad es ambiciosa y vamos a ir a por todas. Este es nuestro año y nuestra ilusión, y nadie nos lo puede quitar. Vamos a dar lo máximo por todos los béticos, por nuestros jugadores, por nuestros técnicos y por toda la familia que hemos creado. El Algeciras debe saber que vamos a ir a muerte.

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