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Algeciras despide al sacristán asesinado: «A los cristianos nos han enseñado a perdonar»

El obispo de Cádiz recuerda que Diego Valencia, el sacristán asesinado por un ciudadano marroquí, murió «por su fe y recordando su fe»

El juez prorroga la detención del presunto autor del ataque en Algeciras hasta el lunes

Una multitud rodea el féretro de Diego Valencia EP

M. Moguer/ S. A.

Algeciras/ Sevilla

Emoción contenida en Algeciras para despedir a Diego Valencia, asesinado presuntamente por Yassine, el ciudadano marroquí detenido por los ataques del pasado miércoles. En la iglesia de Nuestra Señora de La Palma, donde era sacristán y donde encontró la muerte a manos del radical. Ha oficiado el Obispo de Cádiz y Ceuta, Rafael Zornoza. Junto a él, el párroco de la iglesia, Juan José Marina. En el templo, cientos de vecinos y autoridades como el presidente de la Junta, Juanma Moreno, o el alcalde de la localidad, José Ignacio Landaluce.

Según ha indicado el obispo gaditano, los familiares y vecinos de Diego han quedado «dolidos y consternados» tras su muerte. Muy conocido en la ciudad, el fallecido había regentado una floristería y, desde hace años, ayudaba en su parroquia. Zorzona ha añadido sus condolencias y «cercanía paternal a todas las comunidades de Algeciras que han vivido este horror de cerca». De Diego ha añadido que «ha muerto por su fe y recordando su fe», ha añadido.

Asimismo, el obispo ha señalado que «es la Iglesia entera la que sufre junto a la sociedad» y ha recordado que «a los cristianos nos han enseñado a perdonar, orar por nuestros perseguidores». «De no perdonar nos habría ya ganado el mal y hechos como esto nos obligan a fomentar y construir una cultura de la convivencia, del respeto y paz«.

«No basta solo con condenar la violencia, que no tiene justificación, como tampoco el terrorismo o la falta de respeto a la persona y sus libertades«, ha añadido Zornoza, que ha afirmado que «debemos construir sujetos capaces de participar en la construcción de la civilización del amor y del respeto a la vida«.

Diego Valencia, de 65 años, casado y con dos hijas, era sacristán de la parroquia desde hacía 16 años, que había regentado una floristería y muy querido en el mundo cofrade algecireño y en la ciudad, como ha quedado patente con las multitudinarias muestras de dolor expresada por los ciudadanos en general con una concentración en la Plaza Alta y depositando velas y flores en el mismo lugar donde fue asesinado y a la salida del féretro de la Iglesia, entre aplausos de los asistentes en la plaza.

Juanma Moreno

El presidente de la Junta, Juanma Moreno, ha condenado de forma enérgica la muerte del Diego. «Es un asesinato cruel y sinsentido», ha señalado el presidente andaluz, quien ha destacado que Algeciras es un lugar de paz y convivencia donde hay hasta 129 nacionalidades presentes.

«Deja una familia rota, era una persona muy querida y comprometida con sus vecinos», ha destacado Moreno, quien ha añadido que toda Andalucía está «muy afectada» tras el ataque que, por ahora, se investiga como terrorismo. «Esperamos que el trabajo de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado nos lleve a tener la máxima información de lo que ha motivado esta situación», ha terminado el presidente andaluz.

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