Choque de trenes entre el Gobierno y la Junta de Andalucía por el coste de los materiales de la construcción

Las discrepancias se centran en los artículos 4, 5 y 9 del decreto de la Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio. El Gobierno sólo prevé la actualización de precios de cuatro materiales: betún, hierro, aluminio y cobre. La Junta amplía la relación de insumos afectados y, además, abre la puerta a sustituir los materiales acordados en la adjudicación por otros más económicos con la misma calidad. Además, admite que las empresas con certificaciones de obra en 2021 puedan acceder a este mecanismo excepcional, como demandaba el sector de la construcción.

Desde Fadeco Contratistas alaban el decreto andaluz, que consideran «valiente» y «complementario» del nacional en cuanto a las materias que deben haber visto incrementado su coste. De este modo –apostilla su presidente, Rafael Sánchez–, se «da cobertura a cualquier tipología de obra, ya sea civil, de edificación, hidráulica o de carreteras, evitando excluir de forma caprichosa» multitud de proyectos.

«El decreto estatal no vale para nada». Así de categórico se muestra el gerente de la asociación sevillana de constructores y promotores Gaesco, Juan Aguilera. «Nadie dice por qué se han incluido esos cuatro materiales y no el resto». El hormigón que se usa en la mayoría de edificaciones, excluido de la norma estatal, se ha encarecido un 30,8%; el vidrio, empleado en las ventanas, un 31,4%; los sanitarios, un 22%; la madera, un 125%, y el material eléctrico, un 49,5%, según el informe de la Confederación Nacional de la Construcción. También se ha disparado el cobre un 63% y el acero un 55,4%.

Para el responsable de Gaesco, el Gobierno actúa en este asunto como «el perro del hortelano, porque ni como ni deja comer». El Ejecutivo, «tarde y mal», no actualiza las obras suyas y tampoco permite que la Junta, diputaciones y ayuntamientos actualicen los precios con sus propios recursos».