Sanidad
Materno-Infantil de Córdoba: de un hospital completo a sólo consultas externas durante más de quince años
El edificio cuyas obras acaban de comenzar en el Reina Sofía es la reformulación de un proyecto mucho más ambicioso en 2006
Así será el edificio de consultas externas materno-infantiles del Reina Sofía de Córdoba

La historia que se contó en 2006 terminaba de otra forma. El hospital Reina Sofía se habría reconstruido desde sus cimientos para renovar del todo sus instalaciones. Para madres y niños habría todo un edificio, un hospital materno-infantil con camas, quirófanos y consultas propias, y todo tendría que estar terminado en 2016, el año en que Córdoba iba a ser Capital Europea de la Cultura.
Cuando en 2011 el sueño de Córdoba se lo llevó San Sebastián ya estaba claro que aquel proyecto que se había proyectado en tiempos de arcas públicas repletas e impuestos que fluían con alegría del crecimiento inmobiliario no se iba a hacer tal y como se había previsto. Y hubo desde el primer momento poca resignación.
Las consultas externas del hospital Materno-Infantil del Reina Sofía, cuyas obras acaban de comenzar con una inversión de casi 19,3 millones de euros, suponen la adaptación, más económica, de un proyecto que tuvo miras más altas. Lo presentó en 2006 la entonces consejera de Salud de la Junta de Andalucía, María Jesús Montero.
La idea era «refundar el hospital Reina Sofía» con la construcción de nuevos edificios que sustituyeran a los que entonces estaban en funcionamiento. Adaptaba el Plan Director que ya regía y lo hacía más ambicioso y con un amplio plan de inversiones. Llegarían 110 millones de euros y el centro vería crecer su espacio un 26 por ciento.

Dentro del proyecto estaba el nuevo Hospital Materno-Infantil, con varias plantas, unas para las madres y otras para los pequeños. Se habría construido donde ahora está el hospital general y también, entre otros edificios, preveía un hospital médico-quirúrgico.
La crisis económica que se inició en 2007 irrumpió y cambio todos los planes. El Gobierno de José Antonio Griñán tuvo que hacer ajustes y el proyecto se resintió: se construiría un edificio de consultas externas, mientras que la hospitalización seguiría en el mismo lugar.
Desde 2009 la plataforma No Me Quites Mi Hospital ha hecho oír su voz sin descanso para pedir que se respetase el proyecto completo
La contestación ciudadana llegó pronto y se mantuvo en el tiempo, a través de una plataforma que no dejó de movilizarse. Se llamaba y se llama No Me Quites Mi Hospital y ya desde el año 2009 insistió en pedir que el proyecto no se reformulase. Lo querían tal y como estaba, ya que insistía en que el hospital actual no reunía las condiciones.
Con el paso del tiempo se unieron más de 38 colectivos ciudadanos y cosecharon 65.000 firmas de apoyo entre médicos, profesionales sanitarios y ciudadanos de a pie, y aunque consiguieron que se les escuchase ninguno de los Gobiernos de la Junta de Andalucía consintió en recuperar la idea original.

Y, eso sí, el edificio de consultas externas tardó en llegar y no se ahorró los problemas. En 2019 se adjudicó a la Unión Temporal de Empresas formada por Acciona y Jícar, y lo hizo por un importe de 8,7 millones de euros. Muy poco tiempo después las obras se pararon porque las firmas, como no es infrecuente en estos casos, pidieron un replanteamiento.
Tenía que ver con los colectores que debían dar servicio al conjunto. En 2020 las obras se detuvieron y finalmente la Junta optó por resolver el contrato y buscar una nueva licitación. Esta vez, por mucho más dinero, porque la obra costará 19,3 millones de euros.

Ya ha comenzado y debería estar lista en octubre de 2025, cuando hayan pasado los 23 meses de la obra. En este tiempo la plataforma No Me Quites Mi Hospital no ha dejado de manifestarse para insistir en que el proyecto debería ser el que presentó la entonces consejera Montero, ahora ministra, pero al mismo tiempo urgía a que, al menos, se hiciera algo.
Los próximos meses tienen que ver un proyecto que vendrá a consolidar un nuevo reparto de áreas: en la zona occidental las consultas externas y todo lo ambulatorio, para adultos y para niños y madres en edificios separados, y en la zona oriental, la superior, la hospitalización y las camas.
Por su parte, la plataforma ciudadana 'No me quites mi hospital', que surgió en 2008 «para reivindicar la creación de un nuevo Hospital Infantil» que «había sido prometido por la Consejería de Salud», ha afirmado este martes que «la creación ahora del nuevo edificio de Consultas Externas« del actual Hospital Materno-Infantil de Córdoba «es del todo insuficiente».
Ello es así, según ha subrayado la plataforma en una nota, porque el proyectado nuevo edificio, cuyas obras han comenzado, «no da respuestas a todas las necesidades del Infantil, porque encajonará aún más las zonas de hospitalización de los niños y seguirá perpetuando las deficientes condiciones actuales».
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete