¿Qué requisitos son necesarios para deducirse la cuota de hermano?

En el año 2015, el Gobierno de España llevó a cabo una reforma de la ley 49/2002 de 23 de Diciembre de «Régimen fiscal de las entidades sin fines lucrativos y de los incentivos fiscales al mecenazgo». Una enmienda que hace posible que los hermanos de las diferentes hermandades y cofradías puedan deducirse sus cuotas de hermano en la declaración de la Renta si sus corporaciones cumplen con ciertas condiciones. Pero, ¿qué requisitos son necesarios para poder deducirse la cuota de hermano?

Según dice la ley, para posibilitar la deducción de cuotas de sus hermanos, las hermandades tienen que estar dadas de alta en Hacienda , estando en posesión de su correspondiente CIF. Posteriormente, dichas cofradías deberán también estar dadas de alta en el Registro de Entidades Religiosas , en el Ministerio de Justicia y perseguir fines «de interés general» , que a día de hoy los fines propios de las hermandades lo son.

Uno de los requisitos más importantes es que el 40% de los ingresos de las hermandades no proceda de explotaciones ajenas a sus fines , como bares u otras actividades. Y es que en caso de superar este porcentaje, los donantes -en este caso los hermanos- no podrían acogerse a la deducción de las cantidades entregadas como cuotas o donativos. Además, la cofradía en cuestión tendría que tributar por esos ingresos en el Impuesto de Sociedades.

Otra de las exigencias es tener una contabilidad ajustada al Plan General de Contabilidad para entidades sin ánimo de lucro, presentando obligatoria y anualmente las cuentas ante el obispado. Además, entre el 1 de enero y el 1 de febrero de cada año, la hermandad deberá presentar en la Agencia Tributaria el Modelo 182 , en el que se han de desgranar todos los donantes, con su nombre, apellidos, NIF, o CIF, y las cantidades entregadas por cada uno el año anterior. Es importante hacer bien este paso, ya que Hacienda, posteriormente, comprobará si estos datos coinciden con los que presenten los contribuyentes.

En Córdoba, una de las hermandades pioneras en este sentido fue la del Santísimo Cristo del Amor , que a finales de 2016 llevó a cabo una actualización fiscal para acogerse a dicha ley. Para ello, sus hermanos debían de dar su autorización expresa para poder adherirse a dicha deducción en la próxima declaración de la Renta. Un proceso, que de ponerse en práctica en otras cofradías de la ciudad, debe seguir el mismo desarrollo.