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Educación

Las altas capacidades vienen acompañadas de talento, inteligencia y trabajo, pero también tienen debilidades

La profesora Lourdes Martínez narra su caso con dos de sus alumnos: Giovanna Carcele y Rogelio Miguel

Lourdes Martínez con Giovanna Carcele y Rogelio Miguel en Dublín ABC

R. C. M.

Los profesores que se ocupan de la educación de alumnos con altas capacidades hablan de talento, inteligencia y, sobre todo, de un desarrollo a diversos niveles muy por encima del que tienen el resto de sus compañeros. Pero también ponen el acento en capítulos como las habilidades sociales y la inclusión . Entienden que hay que ser muy meticuloso en la formación de estos estudiantes para que no acaben en fracaso escolar. Lourdes Martínez , profesora del colegio SAFA Rafaela María de Pedro Abad , analiza su experiencia personal.

Más que hablar de los métodos y sistemas especiales de los que se vale el profesorado para formar a estos jóvenes, Lourdes se centra en sus especificidades, cómo son y cómo se desarrollan sus vidas dentro y fuera del aula. «Es muy gratificante trabajar con ellos . Son personas muy creativas y trabajadoras», y tienen «muchas ganas de aprender e interesarse por todo».

Al abordar el tipo de educación que reciben estos niños -apunta los casos concretos de Giovanna Carcele y Rogelio Miguel , de Primero de ESO-, la docente siente que el centro en el que trabajan es óptimo para este tipo de alumnos . «Hemos recibido una formación específica e incluso podemos diagnosticar a este tipo de alumnos», declara, al tiempo que indica que el papel del profesor es «el mismo, pero en estos casos se centra en desarrollar al máximo sus capacidades».

Resolución de conflictos

Como mentora, Lourdes ha trabajado con casos como el de Giovanna y Rogelio el «aspecto emocional, habilidades sociales y resolución de conflictos». Explica que a ellos «les cuesta más trabajo» el desarrollo de las citadas funciones. Pero, ¿cómo son realmente estos jóvenes? Dejando a un lado que « trabajan más rápido y a un ritmo superior al de su edad», la profesora puntualiza que sus aficiones son las mismas que cualquier otra persona de su edad. Efectivamente que les gusta jugar a los «videojuegos» y que se divierten «haciendo deporte» y vibran con los triunfos de su equipo de fútbol favorito «como el resto de niños de su edad».

Ahora bien, la «inclusividad» es uno de los retos que se marcan los profesores que, como Lourdes, están monitorizando la formación de los alumnos con altas capacidades intelectuales. «Queremos que en clase trabajen al igual que el resto ». No pasa por alto que, gracias a la Fundación Endesa y la Fundación Escuelas Profesionales de la Sagrada Familia (SAFA), trabajan desde 2015 en el un programa de desarrollo y acompañamiento a estudiantes de entre 12 y 15 años con escasos recursos económicos y altas capacidades.

Giovanna y Rogelio han presentado unos proyectos realmente interesantes . Rogelio ha optado por la robótica , y ha diseñado un robot que pueda actuar en situaciones de rescate, evitando obstáculos y regresando al punto de partida por si mismo. Giovanna en cambio ha querido mostrar cómo las enfermedades raras son eso, enfermedades, y que lo raro es la enfermedad, no la persona.

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