Hazte premium Hazte premium

CIEN DÍAS DE MANDATO EN CÓRDOBA

Bellido: «Nos jugamos el futuro de Córdoba y el crédito como gobierno en la Gerencia de Urbanismo»

El alcalde opta por «comunica resultados y no expectativas» y avisa de que «no hay que atropellarse en estos cuatro años»

José María Bellido, en un momento de la entrevista con ABC Álvaro Carmona
Francisco Poyato

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La Gerencia de Urbanismo y la situación de «atasco» que se ha encontrado el nuevo gobierno municipal van a ocupar muchas páginas y actualidad en estos años en Córdoba.

—Han anunciado un plan de choque para destascar unas tres mil licencias de aquí a final de año. ¿No han puesto el listón un poco alto?

—Es que es nuestro deber. En la Gerencia hay un problema serio que impedía que Córdoba fuera un destino de inversores, dicho, por cierto por la Confederación de Empresarios. Tenemos que llegar y coger el toro por los cuernos, es uno de los grandes retos que tenemos y alabo el papel de Salvador Fuentes, con determinación y experiencia. Y ha hecho algo que es implicar a los trabajadores de Urbanismo, todo el mundo está colaborando. La Gerencia estaba muy mal vista y hemos de darle la vuelta. Y hay que priorizar: no puede ser lo mismo la licencia del Palacio de Congresos de Torrijos que una de obra menor de un particular. El interés público también juega.

—¿El mandato se juega en Urbanismo?

—Sí, porque la agenda va por donde los ciudadanos ven dónde hay que hacer las cosas. Nos jugamos gran parte del futuro de esta ciudad y del crédito del gobierno municipal en desbloquear proyectos clave, desarrollar un plan estratégico y en saber hacer funcionar la Gerencia. En estos primeros compases han sido muchos los encuentros con inversores que quieren venir, ninguno me ha pedido subvenciones o modificaciones raras del PGOU; lo único que piden es seguridad jurídica, si pueden instalarse en un suelo, agilidad administrativa y un plazo seguro para arrancar. Ellos han percibido el cambio.

—Pero los tiempos en Urbanismo son aún más lentos, como ha dicho, y prodigan las operaciones frustradas... Un círculo vicioso.

—Es que en esta ciudad no puede ser que haya que estar doce o catorce meses para lograr la licencia para poner en marcha una promoción o se criben cosas según gustos... Aquí había un problema de seguridad jurídica que está arreglada desde el día uno, porque esa seguridad jurídica la da trabajar con seriedad con los funcionarios, el único criterio que vale es el PGOU. La segunda pata es la agilidad administrativa, y se pongan como se pongan, había un tapón importantísimo en las licencias y en las «licencias exprés» que hay que comprobar. Yo podría fracasar, pero es la ciudad la que fracasa si no se recupera esto.

—¿Cómo va a cambiar la inercia?

—La economía se basa en la confianza empresarial y ésta cambia cuando el discurso político cambia. El discuros político de los cuatro últimos años ahuyentaba empresas. En lugar de la colaboración con lo privado hablaba de lo público, eso espantaba... Y encima la agilidad administrativa era la que era, ¿quién iba a venir?. El cambio de discurso que hemos hecho ya está provocando ese interés.

—No tengo que darle datos de los niveles de paro en la ciudad con tres barrios entre los más pobres del país. ¿Se compromete a rebajar el paro en unas cifras determinadas?

—El paro es la principal preocupación de esta ciudad especialmente en esos distritos. El Ayuntamiento puede hacer lo que puede hacer. Ahora mismo me preocupa mucho la situación a nivel nacional. Si esta desaceleración sigue con la incertidumbre política que reina, eso no está a nuestro alcance... Cuidado que vienen curvas. Voy a hacer lo que se tiene que hacer: plan estratégico, agilidad administrativa, seguridad jurídica, proyectos estratégicos de inversión y para esos tres barrios vamos a poner en marcha un plan específico coordinando esfuerzos de entidades públicas y privadas para empezar a corregir esa situación. Hacen falta herramientas de formación adecuadas a las necesidades del mercado. Conozco empresas del entorno digital o la metalurgia que no encuentran perfiles adecuados por lo que tienen que buscar fuera de Córdoba.

—¿Qué enfoque puede tener ese plan en los barrios que me anuncia?

—El plan no es sólo dar ayudas, es establecer objetivos que van a tener que ver con la formación y educación. No podemos perder generaciones por vivir en un barrio determinado. También la intervención directa con personas en situación de exclusión social, programas de segunda oportunidad.

—¿Cómo son las relaciones con Cs?

—Muy buenas. Por encima de todo, somos un grupo de personas que trabajamos por un objetivo común, las relaciones van mejorando cada día. Es evidente que somos dos partidos distintos y a veces se dan roces, pero es más lo que nos une.

—¿Le da la impresión de que están más centrados en hacerse ver?

—En la política de comunicación del otro partido no entro. Nosotros estamos para gobernar y yo soy más de contar las cosas cuando están hechas, que de ir haciendo avances de cosas que se van a hacer, que no tiene mucho sentido. La sociedad está en general cansada del político que va prometiendo y lo que quiere es que haya resultados. Yo quiero comunicar resultados y no expectativas. Comunicar nuestro trabajo, que es mucho. Tenemos cuatro años y no hay que atropellarse. Es cierto que Ciudadanos tiene áreas de mucha visibilidad.

—¿Por qué ha creado un «núcleo duro» por donde va a pasar la coordinación de áreas y empresas, no se fía del resto?

—Como en todas las organizaciones lo que hace falta es que haya como una dirección general que coordine al resto del equipo, y me he rodeado de gente de confianza, con experiencia. He vivido gobiernos como los de José Antonio Nieto donde el concejal con menos personal de apoyo era el propio alcalde, y eso no tiene sentido. Desde aquí dirigimos el conjunto de la nave y apoyamos a los grandes proyectos de las Concejalías. Pongo el ejemplo del espectáculo de luz y sonido de la calle Cruz conde en Navidad. Implicadas dos áreas como Promoción e Infraestructuras con una influencia directa del Área de Alcaldía y se implica a los funcionarios que tienen más relación con el alcalde.

—La marcha de Juan Miguel Moreno Calderón ha sido un serio revés...

—Primero en lo personal. Lo conozco desde hace quince años, es un compañero muy querido y una persona de una categoría intelectual brutal. Es evidente que tenía en sus manos Cultura muy segura. La cultura va a ser un eje clave en el Plan Estratégico. Hemos tratado de solucionarlo con Blanca Torrent, un reto importante, y ganamos a una persona como Lourdes Morales en Transformación Digital.

—¿Había quedado relegada en el reparto inicial Blanca Torrent?

—No, no, no es así. Blanca viene a lo que viene al Ayuntamiento, viene de la empresa y lo hace para trabajar en desarrollo económico, su ámbito natural. Ahora con Cultura seguro que no se puede decir nada respecto a que esté o no relegada.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación