Hazte premium Hazte premium

Coronavirus Córdoba

El confinamiento elevó la ludopatía un 15% y potenció la de los jóvenes

La Asociación Acojer, que ayuda a salir de la adicción a 150 personas, alerta de que ya atiende a menores que se engancharon a través de videojuegos

Una mujer pasa por delante de un bingo VALERIO MERINO

Rafael A. Aguilar

LO perdió todo en una semana. Y en ese «todo» está incluido mucho, muchísimo más, de lo que tenía en la cuenta corriente y de lo que valía su patrimonio. Se dejó 500.000 euros en las apuestas deportivas en unos pocos días.

La víctima del despropósito que él mismo se cavó es un pequeño empresario al que le iban bien las cosas... hasta que en su camino se cruzó primero una máquina tragaperras, luego un pasatiempo de internet en el que se jugaba pequeñas cantidades de dinero y por último la visita compulsiva a los locales dedicados a las apuestas.

Al principio tuvo suerte y casi siempre ganaba, y cuando perdía se empeñaba con una ceguera enfermiza en recuperar el dinero que se tragaba su inconsciencia tentando otra vez a la fortuna, que un día se le volvió en contra. Hasta que se arruinó. Cerró su empresa, entró en una depresión aguda y se puso en manos de los voluntarios y los profesionales de la Asociación Cordobesa de Jugadores en Rehabilitación (Acojer), que preside Salvador Secilla y que tiene su sede en los pabellones de la avenida de la Agrupación Córdoba , en el antiguo Hospital Militar.

Una enfermedad crónica, no un vicio

El relato que hace Secilla del aumento de la ludopatía es preocupante. «En estos momentos, el tres por ciento de la población cordobesa tiene esta enfermedad crónica, que no es un vicio sino una patología, y que además es muy difícil de curar», declara Secilla a ABC . La situación no es nueva, si bien el confinamiento de la pasada primavera ha motivado un repunte notable de las personas que padecen este mal en Córdoba. «Hemos notado un incremento de en torno al quince por ciento de adictos al juegos que vienen a nuestra sede a pedir auxilio: ahora les prestamos ayuda a una ciento cincuenta familias», resume Salvador Secilla .

Un ciudadana delante de un cartel con una ruleta VALERIO MERINO

¿Y por qué el enclaustramiento que ordenó el estado de alarma decretado en marzo ha elevado el número de casos de ludopatía? Las razones, explica, el máximo responsable de Acojer , tienen que ver con la ansiedad que provocó en algunos ciudadanos la incertidumbre por su futuro y con el agobio por la imposibilidad de poder salir apenas de casa: el refugio en internet como medio de distracción y de contacto con el mundo no fue constructivo en estos casos, sino que se volcó en las apuestas a través de los numerosos portales que enganchan a los usuarios con la promesa de dinero fácil a cambio de un falso riesgo mínimo. «Disfruta de nuestro superbono de 150 euros. Empieza a disfrutar con nosotros», llama a los clientes una de las páginas webs más visitadas.

«El perfil del adicto es de 25 años, y hasta hace poco era de 50», resume el presidente de Acojer

El alza importante de los beneficiarios de Acojer está relacionado con un factor que ha marcado la actividad de los últimos cuatro meses en muchas entidades que se dedican a ayudar a personas con problemas mentales o desviaciones de la conducta: la interrupción parcial de los tratamientos o de las terapias presenciales por el cierre obligado de sus sedes. «Cuando acabó el confinamiento tuvimos que reactivar algunos los programas que había sido imposible mantener con él. Y ese parón se notó», subraya en este sentido el presidente de Acojer .

Hay otro factor determinante en la ludopatía: la rebaja sustancial de la edad de las personas caen en su pozo. Explica Secilla que «hace unos años el perfil medio era de unos cincuenta años, pero ahora ha descendido a los veinticinco años: le puedo decir que por desgracia tenemos que atender a chavales menores de edad a los que nos traen sus padres, porque de los videojuegos han pasado a las apuestas y se han quedado enganchados a ellas», subraya el directivo de la Asociación de Jugadores en Rehabilitación de Córdoba . Para devolverlos al mundo libre de adicciones, Acojer cuenta con un cuerpo de 30 voluntarios además de con un nutrido de profesionales: entre todos tratan de que la promesa del dinero fácil no arruine más vidas.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación